La Policía Local ha intensificado la vigilancia en la diputación de Marchena, después de que el pasado miércoles un vecino fuera apuñalado diez veces en su casa para robarle un cartera con 30 euros. El hombre, de 61 años, falleció en la madrugada del viernes en el Hospital Rafael Méndez a consecuencia de las heridas. Los controles policiales se han incrementado desde entonces no sólo en Marchena, sino también en La Hoya y Almendricos donde también se han producido robos.

Uno de esos controles de vigilancia permitió en la madrugada del viernes detener a dos rumanos que fueron pillados in fraganti cuando guardaban en un vehículo DVD, televisores, vídeos y cintas de DVD piratas. Los agentes los detuvieron y trasladaron a la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía, donde se detectó que se encuentran ilegalmente en nuestro país. El turismo se encuentra en el depósito municipal.

«Fue de madrugada. Los dos hombres estaban metiendo el material en el turismo. El coche se encontraba apartado del camino de madrugada», han señalado a La Verdad fuentes de la investigación. Ahora, se están cotejando las huellas, además de comparar el material requisado para saber si consta en alguna denuncia por robo. El vehículo de los detenidos tiene matriculo de Castellón, por lo que también se baraja la posibilidad de que se trate de una banda con ramificaciones en la costa levantina.

Sin documentación

Ninguno de los dos portaba documentos que los acrediten, así como tampoco el vehículo que no aparece en los catálogos de turismos robados. Mientras, continúa las pesquisas para detener a los culpables del crimen del vecino de Marchena. Para hoy está prevista una reunión de los vecinos a la que podría acudir el alcalde, Leoncio Collado. Existe gran preocupación en la zona, ya que, según los vecinos, los robos se han convertido en algo habitual en el lugar. Los lugareños también denuncian ataques, amenazas y otras situaciones que han alterado la vida normal de la diputación.

Algunos vecinos han mostrado su intención de patrullar los caminos durante la noche para evitar nuevos asaltos a las viviendas. Les preocupa también que muchos agricultores tienen que realizar sus riegos por la noche, sin protección alguna. «Tienes que irte a regar a las tres de la madrugada y tienes que dejar a la mujer y los hijos solos en casa, sin saber qué va a pasar. También corremos peligro porque en cualquier bancal, nos dan un golpe y nos matan por robarnos cuatro duros», afirma Joaquín Ortega.

Les preocupa, sobre todo, el gran número de ciudadanos extranjeros que vagan por la zona día y noche. «No hay trabajo, porque no hay trabajo para tantos. Si no tienen dinero, de qué comen, cómo visten… No podemos tender la ropa en la calle, no podemos tener ya animales de granja porque se los llevan… esto es una ruina», agrega Antonio Mulero.

La mayor preocupación es que los autores del crimen continúan libres. «Queremos que los detengan, porque no estamos tranquilos. Mañana puedo ser yo, o mi vecino, o mi mujer o hijas», asegura indignado otro vecino. Entre las exigencias que harán mañana a las autoridades está que se incremente la vigilancia policial en toda la zona. También pretenden exigir que se registren las viviendas abandonadas donde se esconden muchos ciudadanos extranjeros sin papeles. «Si están ilegales lo que tienen que hacer es echarlos. Hay que registrar las casas viejas y encontrar a los que mataron a Miguel», concluyen.