La posibilidad de un avance o cualquier tipo de acuerdo en el nuevo encuentro que mantendrán hoy el Gobierno de España, los Ejecutivos de Canarias y Ceuta, y el Partido Popular (PP), dos meses después de que los populares suspendieran las negociaciones por discrepancias sobre el contenido de una carta remitida a Europa, se aleja. A la frialdad con la que el PP acude a este nuevo encuentro y reconocida por la propia organización en Madrid en Canarias, su secretario general, Manuel Domínguez, sí defiende el acuerdo para los menores se sumó ayer un nuevo agente: Vox.

La formación de Santiago Abascal volvió a entrar en escena para amenazar al PP ante un posible acuerdo con el Gobierno en materia migratoria. De igual forma que en julio rompió los pactos de gobierno que mantenía con el PP en cinco comunidades autónomas pocos días antes de que se votara en el Congreso la admisión a trámite de la propuesta para repartir a los menores migrantes, forzando así el voto en negativo de los populares (que impidió junto a Junts que se saliera adelante), ayer amenazó con suspender el apoyo a estos gobiernos autonómicos a la hora de aprobar los presupuestos del próximo año.

La amenaza es dejar sin estabilidad a estas cinco comunidades en las que estaban en coalición y en donde el PP gobierna ahora en minoría y con apoyos de la formación de Abascal: Castilla y León, Murcia, Extremadura, Valencia y Aragón. En Baleares también prestan apoyo parlamentario.

Como indicó ayer el secretario general de Vox, Ignacio Garriga, en declaraciones recogidas por Europa Press, la suspensión de las negociaciones presupuestarias responden a la decisión del PP de acudir hoy a la reunión para abordar el reparto de los menores a otras comunidades a través de la modificación del artículo 35 de la ley de Extranjería y la posibilidad de que haya avances. «Nosotros no vamos a participar en el reparto de inmigración ilegal y de inseguridad que pretenden Feijóo y Sánchez. Si el PP quiere seguir impulsando las políticas del PSOE, que negocie los presupuestos con ellos», aseguró ayer Garriga en una visita a un barrio de Barcelona y recogidas por Europa Press.

Según apuntó, si el PP quiere seguir negociando con Vox los presupuestos en los territorios, «tendrá que romper los pactos con el PSOE». Ahora la pelota está en el tejado del PP que también se topa con un amplio rechazo a acoger menores migrantes entre sus propias comunidades autónomas. Es el caso de Madrid, que en varias ocasiones ha mostrado su rechazo a acoger migrantes de Canarias y ayer, su consejera, de Familia, Ana Dávila, se opuso de forma directa a la modificación de la ley de Extranjería para distribuir a los menores. «La fórmula es un acuerdo con un sistema de repartos real y no un sistema en el que luego hay un reparto que está escondido y desde luego no es la fórmula el cambio de un artículo de la ley de extranjería», comentó Dávila, que acusó al «Gobierno de Pedro Sánchez de culpar a otros partidos políticos de la grave situación de caos», según declaraciones recogidas por EP tras la Conferencia Sectorial de Infancia en Madrid.

Desde el PP se afeó ayer la decisión de Vox de suspender las negociaciones presupuestarias en las comunidades pero no se entró a valorar qué postura adoptará hoy el partido durante el encuentro que abordará la reforma de la ley de Extranjería. Los populares se aferran al documento que en septiembre el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, firmó con el presidente canario, Fernando Clavijo, y que señalan como la hoja de ruta en política migratoria para España.