Hola. ¿Qué tal todo? Espero que estés bien.

También espero que no estés sufriendo en casa esta oleada de bulos y desinformación que se ha desatado tras la DANA. No es que sea nueva, pero las inundaciones, las muertes, la incertidumbre y todo lo que ha habido alrededor de la catástrofe de València han disparado las noticias falsas, las medias verdades, los influencers y comunicadores (no son periodistas) intentando ser protagonistas, los intentos de establecer unos “hechos alternativos”, como dijo una consejera de Trump en su momento. Básicamente, cualquier cosa que sirva para contaminar el debate público.

Estos bulos están teniendo mucho éxito entre los adolescentes, proclives por varias razones a dar mucha credibilidad a según quién. Un docente escribía hace unos días: “Esta ha sido mi peor semana desde que me dedico a la docencia. He tenido que explicar infinidad de veces que no se puede agredir a un político, que gracias a los impuestos tienen una educación gratuita (incluso los libros), que los inmigrantes ilegales no tienen paguitas, que un barco con antenas marroquíes no ha sido el creador de la DANA…”

Y, quizá sea tu caso, padres y madres se preguntan qué pueden hacer. No acaban de entender cómo sus hijos (sí, es una cosa bastante masculina) han caído ahí y no saben cómo sacarlos o, casi mejor, ayudarles a salir ellos solos. Es una situación complicada: los adolescentes están forjando su identidad, tienden a rechazar de alguna manera las figuras de los progenitores y es fácil que vivan en pequeñas burbujas (redes – amigos) que se retroalimentan.

Pero se pueden hacer cosas, nos cuentan quienes saben. Hemos hablado con varias expertas, desde psicólogas a formadoras, pasando por docentes, y nos han dado una serie de consejos para que quienes estéis interesados podáis trabajar en casa con vuestros hijos. Os dejo algunas ideas (te adelanto que esto requiere de un cierto compromiso por vuestra parte, no va de ponerle deberes al chaval):

Hay más estrategias. Si te interesa el tema, te recomiendo que pinches en el enlace y leas el artículo. Ahí está todo bien explicado y argumentado por las propias expertas.

Con esto me despido, siento si este boletín ha salido un poco largo, teníamos mucho que contar hoy.

Gracias por estar ahí.

¡Hasta la semana que viene!