De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística (INE), Asturias aumentó su población en 2.504 habitantes en el tercer trimestre de 2024, hasta situarse en 1.012.562 a fecha de 1 de octubre. El monto más relevante de población que se asienta en Asturias procede de Hispanoamérica, fundamentalmente de Colombia, seguido de Venezuela y Cuba. Desde abril de 2023 han llegado a Asturias un total de 4.090 personas procedentes de Colombia. En el caso de Venezuela esa suma da la cifra de 2.740 personas.

Pero, ¿qué razones llevan a colombianos y venezolanos a escoger Asturias como lugar de residencia para construir su proyecto de vida? La Voz analiza con algunos representantes de estas comunidades las causas que les han llevado a convertirse en las dos fuentes de población extranjera residente en el Principado de mayor preponderancia.

«Madrid y Barcelona ya están masificadas y el migrante es visto como un problema»

Montserrat Mireia Menes es la presidenta de la Asociación Venezolano Asturiana de Oviedo (AVAO). Explica que una de las razones que justifican esta cercanía radica en el hecho de que «muchos asturianos emigraron a América y llegaron a Venezuela». De hecho, explica que «el Centro Asturiano de Caracas acogió una enorme población de asturianos», al tiempo que hay «comunidades de asturianos repartidas por todo el país».

La presidenta de la Asociación Venezolano Asturiana de Oviedo comenta que ciudades españolas como «Madrid y Barcelona ya están masificadas y el migrante es visto como un problema». En esta línea, las personas que vienen de Venezuela buscan proporcionarle a sus familias «una vida estable y ordenada», que es lo que aporta el Principado.

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La capital de España, en su opinión, es una ciudad «cara» y que no presenta las mejores «condiciones de vida en cuanto al ambiente y al entorno». Desde su punto de vista, «Oviedo, Gijón, Avilés e, incluso, los pueblos» de Asturias son, cada vez más, percibidos como opciones apetecibles para la inmigración venezolana. Respecto a los asturianos, Montserrat Mireia Menes admite que «hay que aprender a querer su personalidad» y su (nuestra) tendencia a hablar a volúmenes altos, lo cual es «algo que choca de entrada».

Comenta que muchos de los venezolanos que trabajan cuidando a personas mayores «se sienten queridos y casi parte de la familia». Y es que considera que los venezolanos son personas «de trato suave» a los que se les educa «en el respeto a los mayores». No obstante, considera que, «cuando los asturianos finalmente te abren las puertas, ya no pueden vivir sin ti».

A su juicio, «el cariño que sienten los asturianos por los venezolanos es verdadero». Montserrat Mireia Menes explica que la misión de la Asociación Venezolano Asturiana de Oviedo es favorecer la «hermandad y los vínculos» entre la comunidad venezolana en la región. En este sentido, desarrollan «eventos y clubes», así como «actos folclóricos y culturales» que ayudan a que «la gente se sienta un ratito en su casa».

No duda en reconocer que «la adaptación es dura» cuando se llega a una región como Asturias. Y es que «el clima hace mucha mella en el ánimo». Por eso hace un llamamiento para que los venezolanos que vayan a emigrar a la región o acaben de llegar se pongan en contacto con AVAO enviando un «mensaje privado a través de la dirección de Instagram @avao_venastur».

«En Colombia hay muchas referencias a Asturias por el tema de los derechos humanos»

Javier Orozco Peñaranda es el director del programa asturiano de atención a víctimas de la violencia en Colombia e integrante del Colectivo de Colombianos Refugiados en Asturias. Explica que la emigración colombiana en la región «es diversa». Entre las razones que justifican esta querencia de los colombianos por el Principado cita que, hasta cierto punto, se trata de un «territorio parecido a Colombia». Asimismo, hay «muchas referencias a Asturias por el tema de los derechos humanos, por el carbón que sale hacia aquí, por los puertos…».

Colombianos en Asturias en un acto del programa de atención a víctimas de la violencia en Colombia con Amnistía Internacional
Colombianos en Asturias en un acto del programa de atención a víctimas de la violencia en Colombia con Amnistía Internacional

En este sentido, aporta el dato de que hay «más de sesenta empresas asturianas en Colombia». Otra de las razones que, desde su punto de vista, explican la salida de ciudadanos del país están en «el conflicto armado interno que expulsa población», en el sentido de que «hay territorios en disputa y eso expulsa gente».

También está el hecho de compartir «el idioma», además de que en Asturias hay «mucho empleo en verano en la hostelería». Javier Orozco Peñaranda define al colombiano como un emigrante con «enorme capacidad de adaptarse», así como una «población joven que trabaja, ayuda a crecer población y aporta».

El director del programa asturiano de atención a víctimas de la violencia en Colombia explica que en su país también se están empezando «a pagar las consecuencias del cambio climático». Ahora mismo se está padeciendo un «periodo de lluvias torrenciales», que afecta a «gente que construyó en zonas de riesgo» y empieza a expulsar «a poblaciones colombianas» que sufren el desarraigo.

Javier Orozco Peñaranda recuerda que el programa asturiano de atención a víctimas de la violencia surgió «hace 24 años y acoge a personas de la dirigencia social colombiana amenazadas de muerte por su labor». Estas personas, en este sentido, «no suman como emigración, porque después vuelven». No obstante, el Principado «una opción de refugio temporal ante la falta de garantías para defender derechos que aquí son normales».

En esta línea, comenta que Colombia es el «país más peligroso del mundo para las personas que defienden el medio ambiente». Apunta que estas personas en Colombia son declaradas objetivos militares y, de hecho, la mitad de los defensores del medio ambiente asesinados en el mundo el año pasado «lo fueron en Colombia».

Explica que algunos de los participantes del programa asturiano de atención a víctimas de la violencia en Colombia «están aquí hasta comienzos de diciembre». Comenta que en la actividad de este programa toman parte, de alguna u otra manera, «el Gobierno de Asturias y el de España». Cuentan, asimismo, «con el apoyo de 16 asociaciones». «La labor que se hace en Asturias es de diplomacia ciudadana por la paz», recalca.

En este sentido, apunta que «Asturias lleva 20 misiones sobre el terreno para visitar regiones en conflicto», lo que ha contribuido a la entrega de 20 informes «en Bogotá a la Comisión de la Verdad», así como a la Jurisdicción Especial de Paz, «el tribunal que está juzgando algunos crímenes de guerra».