Mattarella exige a Musk que «respete la soberanía» de Italia

El multimillonario estadounidense se pregunta si el país europeo es «una autocracia» debido al frenazo de los jueces a la política migratoria de Meloni

Diario Vasco, Darío Menor Corresponsal. Roma, 14-11-2024

Elon Musk sigue dispuesto a influir en la política italiana. Un día después de afirmar que «tienen que irse» los jueces que ordenaron el pasado lunes que fueran llevados a Italia los siete inmigrantes que, tres días antes, habían sido internados en los centros que ha construido en Albania el Gobierno de Roma, el hombre más rico del mundo volvió este miércoles a apoyar este controvertido proyecto con el que su amiga Giorgia Meloni pretende frenar la inmigración irregular.

Lo hizo con un nuevo mensaje publicado en la red social X (antiguo Twitter), de la que es propietario, en el que se preguntó si Italia es «una democracia o una autocracia no elegida» en la que quienes «toman las decisiones» son los magistrados. La nueva injerencia de Musk llegó poco después de que se conociera que el flamante ganador de las elecciones presidenciales estadounidenses, Donald Trump, a quien apoyó durante la reciente campaña, le va a nombrar responsable del Departamento de Eficiencia Gubernamental del nuevo Gobierno estadounidense, junto al empresario Vivek Ramaswamy.

Al dueño de multinacionales como Tesla, Starlink o SpaceX no tardó en responderle la máxima figura institucional de Italia, el presidente de la República Sergio Mattarella. En una escueta y dura nota, el jefe del Estado le recordó a Musk, aunque sin nombrarlo, que alguien que está a punto de asumir «un importante papel de gobierno en un país amigo y aliado», como le ocurre a él, «debe respetar la soberanía y no atribuirse la tarea de dar lecciones».

«Un gran país democrático»
Mattarella subrayó además que Italia es «un gran país democrático» que «sabe cuidar de sí mismo en el respeto de su Constitución». Ésta confirma la separación de poderes que ha sacado a relucir la intervención de los jueces en el proyecto de Meloni para internar a los migrantes que cruzan en el Mediterráneo central en los centros de deportación construidos en Albania.

También señala la Carta Magna que en caso de conflicto entre la legislación nacional, como la impulsada por el Gobierno para tratar de blindar el funcionamiento de estos campamentos, y la europea, debe prevalecer ésta última. Será, de esta manera, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea el que dictamine en las próximas semanas si resulta o no admisible el funcionamiento de este polémico proyecto impulsado por Meloni.

A la primera ministra los comentarios sobre la política italiana de parte de Musk, con quien se ha reunido en tres ocasiones en los últimos meses, comienzan a colocarle en una posición incómoda. Más aún después del contundente mensaje de Mattarella, que el pasado diciembre ya advirtió en un discurso sobre el peligro que suponen para la democracia los «oligarcas de diverso linaje» que se dedican a la «exploración submarina, las misiones espaciales, los costosísimos sistemas satelitales y las plataformas de comunicación sociales». Sin nombrar directamente tampoco entonces al multimillonario de origen sudafricano, el presidente de la República señaló que figuras como la suya constituyen «un verdadero contrapoder».

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)