‘Mariposas negras’, poner cara a los refugiados por el clima

Público, María García de la Fuente, 12-11-2024

“¿Dónde estamos, mamá? ¿Dónde vamos?”. “El mar sigue creciendo”. “¡Por favor, es una emergencia!”. “Nos echa el clima de nuestro país”. “Nuestro pueblo no va a sobrevivir”… Son algunas de las desesperadas frases que se escuchan en la película española de animación ‘Mariposas negras’, de David Baute, para poner cara a los 200 millones de refugiados climáticos que hay ya en el planeta. La trágica DANA que ha azotado España nos hace sentir aún más cercano este enorme reto que tiene planteado la Humanidad. Hoy comienza una nueva Cumbre de Cambio Climático. ‘Mariposas negras’ se estrenará en cines el 5 de diciembre.

Las consecuencias del cambio climático las vemos cada vez más cerca de nosotros, con olas de calor sucesivas y continuas en verano, lluvias torrenciales cada vez más frecuentes e inundaciones hasta ahora desconocidas. Sin embargo, detrás de estas catástrofes hay personas, millones de personas cuyas vidas ya no volverán a ser como antes y que se ven obligadas a abandonar la ciudad donde nacieron o el pueblo donde han vivido todos sus antepasados.

Desde hoy, 11 de noviembre, hasta el día 22 se celebra en Bakú (Azerbaiyán) la XXIX Cumbre de Cambio Climático y los protagonistas deberían ser los millones de personas –se calcula que ya son 200 millones– que ya no tienen un hogar donde vivir por los efectos del cambio climático y se ven obligados a emigrar. Sus tierras, pueblos o ciudades están anegadas por el agua de huracanes y lluvias torrenciales o bajo una sequía extrema que está provocando guerras por el agua.

Estas realidades están ocurriendo en África, Asia o el Caribe, y hasta allí ha viajado durante los últimos 12 años el director de cine David Baute para documentarse sobre las migraciones climáticas y que ya estrenó en 2020 el documental Éxodo climático y narra la tragedia de tres mujeres que lo han perdido todo por efecto del cambio climático y ahora emigran para emprender una nueva vida.

El 5 de diciembre estrenará en cines Mariposas negras, una película de animación para adultos que presenta como protagonistas a tres mujeres que no tienen otra alternativa en su vida que emigrar y no por conseguir una vida mejor, sino porque su vida, sus tierras y sus pueblos han desaparecido. Migran para salvar su vida, por obligación.

Baute nos cuenta que ha elegido el formato de animación porque quería plasmar lo que está pasando de “forma sobria y sin dulcificar nada, porque la realidad es lo que es”. Además, la animación le permite contar un relato durante varios años y es la mejor forma de llegar al espectador, que no se quedará impasible.

Mariposas negras, producida por Ikiru Films y distribuida por Sideral, es fiel reflejo de las caras del cambio climático. Una película que remueve por dentro y hace reflexionar a cada espectador, que podría estar en esas mismas situaciones, si alguna vez su casa desaparece, como desgraciadamente acabamos de ver en la Comunidad Valenciana. Una animación de alta calidad que nos trasmite “un mensaje duro, pero que el público tiene que conocer”, apunta Baute.

En muchas ocasiones, al hablar de cambio climático nos olvidamos que detrás de sus efectos hay personas. “Nos hemos olvidado de ponerle rostro”, añade el director. Personas que llegan a París, Nairobi o Dubái, como sucede en la película, y que están allí por obligación porque preferirían haberse quedado en sus pueblos. Sobreviven en esas ciudades, porque no tienen alternativa.

En la actualidad, el cambio climático es la primera causa de migración en el mundo, con más de 200 millones de personas desplazadas, pero aún no está reconocida dentro del estatuto de refugiado de Naciones Unidas. Se ven desamparados.

Las inundaciones y crecidas del nivel del mar que han sumergido a islas o las sequías que devastan cosechas están acabando con culturas ancestrales, que ya no volverán. “Nos echa el clima de nuestro país”, dice Valeria, una de las protagonistas de la película.

Fotograma de la película de animación ‘Mariposas negras’.

Baute recoge en su película la historia real de Tanit, Valeria y Shaila, tres mujeres de Kenia, la isla caribeña de San Martín y la India que no tienen otra alternativa que dejar sus casas o lo que queda de ellas y emigrar a grandes ciudades. Las mujeres y los niños son los más vulnerables en las migraciones, y los que sufren más violencia y abusos. Son los más desprotegidos.

La música es de Diego Navarro y cuenta con una canción original, compuesta expresamente para la película por el compositor Rubén Blades, sobre las migraciones forzadas. Mariposas negras ha sido seleccionada en la sección oficial de algunos de los más prestigiosos festivales de cine documental como el IDFA (International Documentary Film Festival Amsterdam) o el DocsMX (Festival Internacional de Cine Documental de la Ciudad de México).

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