El portavoz del grupo municipal de Vox en el Ayuntamiento de Burgos, Fernando Martínez Acitores, ha justificado la cancelación de los convenios con Burgos Acoge, Atalaya Intercultural y Accem al “efecto llamada” que produce el trabajo con los inmigrantes en estas organizaciones.

La retirada de los fondos a estas organizaciones era la condición, según apuntó la portavoz del PP, Andrea Ballesteros, para aprobar los presupuestos de 2025.

Sin embargo, Acitores, ha negado tal extremo y ha asegurado que esta medida forma parte de “la negociación” entre los dos partidos del equipo de Gobierno. El objetivo de Vox con la retirada de los convenios, según Acitores, es “priorizar las necesidades de los burgaleses y asegurar que los fondos se destinen a proyectos que beneficien directamente” a la ciudad.

El partido de Abascal en Burgos ha incidido en que esta decisión “forma parte de las negociaciones para la aprobación de los presupuestos de 2025” y refleja su compromiso con una gestión responsable y eficiente de los recursos públicos“.

Las cuantías que anteriormente se destinaban a estas organizaciones ascienden a un total de 119.510 euros, dinero que se dirigirá ahora a la Concejalía de Mayores, Juventud e Infancia.

En detalle, Atalaya recibía 13.000 euros, Accem 28.188 euros y Burgos Acoge 78.322 euros.

El objetivo que se persigue con la retirada de las subvenciones es “eliminar” la inmigración de carácter irregular y “endurecer las penas” contra las mafias de inmigración y sus colaboradores. Además, pretenden “acabar con las políticas de efecto llamada”.

Por lo que respecta al resto de los aspectos del presupuesto, el portavoz de Vox ha asegurado que se trata de “los más realistas” de la historia en Burgos. En este sentido, ha valorado las inversiones por valor de 30 millones de euros y el compromiso de amortización de la deuda que se verá “reducida en 16 millones de euros”.