Fin de semana negro en la denominada ruta canaria, la más peligrosa de las existentes para acceder desde África a Europa. En apenas 48 los servicios de salvamento y algunos barcos que navegaban por la zona han rescatado a casi 2.500 inmigrantes de los que 329 son menores. Se han registrado seis muertos, inmigrantes que perdieron la vida ya muy cerca de la costa, pero hay al menos 45 más que perecieron durante la larga travesía.

Del total de 2.500 rescatadas, la mitad corresponde a Lanzarote, con 969 personas que iban a bordo de 20 lanchas neumáticas y pateras, a las que se podrían sumar los 156 ocupantes de tres zódiac que fueron desembarcadas por Salvamento Marítimo en Fuerteventura, dada la saturación que sufrían ya los recursos de acogida disponibles en Arrecife.

Además, ocho cayucos con 752 personas fueron socorridos desde El Hierro y una última embarcación con 72 ocupantes llegó al puerto de Los Cristianos, en el sur de Tenerife.

Del total de rescatados, uno de cada seis (el 16,8 %) es menor de edad. Además, el recuento incluye a 225 mujeres, que representan el 11,5 % del total de supervivientes.

La presión migratorio no descendió este lunes y los cuatro barcos que Salvamento Marítimo tiene destacados en esa isla rescataron a 486 personas de nueve lanchas neumáticas. Esa cifra incluye a 31 mujeres y a un mínimo de doce menores, según los recuentos que facilita Salvamento Marítimo.

De hambre y sed

Esta es la cara menos trágica del drama migratorio. Pero hay otra, la de las muertes de quienes lo intentan ,pero no lo logran. Y este fin de semana se han conocido 55 más. Cuarenta y ocho perecieron de hambre y sed en un cayuco que estuvo tres semanas en el Atlántico y del que solo sobrevivieron diez ocupantes. Otras seis personas más murieron en dos naufragios de neumáticas al este de Lanzarote.

Con los ojos puestos en la mayor dana registrada en la historia que ha colapsado Valencia, el Gobierno canario hizo ayer valoración de este negro fin de semana en sus aguas. Conscientes de que todos los focos están puestos ahora en la zona levantina, el portavoz del Ejecutivo canario dijo que están viviendo un compás de espera antes de que finalmente se convoque la Conferencias de Presidentes y se analice este problema.

Pero Alfonso Cabello fue muy crítico. Considera que no ha habido respuesta del Estado y se queja de que no ha llegado «ni un euro» para ayudar al Gobierno del archipiélago. Cabello recordó que en lo que va de año han llegado a las Canarias más de 34.000 inmigrantes y todo apunta a que se puede superar la cifra récord de 39.000 entradas ilegales registradas en el 2023.

También se conoció ayer que agentes de la Policía Nacional había detenido a nueve individuos como autores de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros. Todos ellos eran patrones de patera que hacía la ruta entre Argelia y la costa murciana.