El PSN acata la decisión de la Fiscalía, que ha decidido no investigar a Vox por un posible delito de odio a cuenta de la moción que la extrema derecha ha presentado en el Parlamento criminalizando al colectivo migrante, y que a juicio los socialistas contiene expresiones de “xenofobia” y “racismo”. El Ministerio Público considera que no puede haber un delito de odio porque se trata de un posicionamiento político que no se ha sometido a debate ni a votación, por lo que, sin entrar al fondo de las expresiones planteadas, no hay hecho delictivo posible.

El PSN asume la posición del Alto Tribunal, pero expresa su malestar por que el archivo se hiciera público en una página web afín a Vox antes de que los socialistas la comunicaran. Una filtración por la que apunta directamente a la Fiscalía. “La decisión solo fue informada al Partido Socialista y el Partido Socialista no la ha filtrado a ningún medio de comunicación. Lo sabíamos solo la Fiscalía y el presente portavoz, que fue quien presentó con su DNI la querella. Yo no he dicho nada. Por lo tanto, aquí ha habido una filtración. Y creo que es grave, porque es un tema sensible, y más en estos tiempos, en un tema importante como es un delito de odio”, argumentó este lunes Ramón Alzórriz.

El portavoz socialista recordó ademá que “por una filtración se ha llevado a los tribunales al fiscal general del Estado”. “Nosotros no estamos diciendo que le vamos a llevar –a los tribunales–, ni mucho menos. Estamos diciendo que hay dos partes, la Fiscalía y el Partido Socialista, y el Partido Socialista no ha abierto la boca, eso es lo que he dicho yo, cada uno que saque sus conclusiones”, señaló Alzóriz, que evitó polemizar más. “Yo lo que digo es lo que digo. Hay dos actores principales, uno es el Partido Socialista y yo como portavoz, que registré la denuncia, y otro es la Fiscalía. Cada uno que saque sus propias conclusiones”, zanjó.