Mas también se refirió ayer a la polémica surgida esta semana por el traslado de inmigrantes ilegales en aviones desde Canarias a Barcelona del cual ni Ayuntamiento ni Generalitat tenían notificación.«No sé de qué sirve que España, Cataluña y la alcaldía de Barcelona estén gobernadas por el mismo partido, el PSOE, si no se comunican entre ellos», se preguntó ayer el líder convergente. «La sensación general es de abandono a Cataluña en estos temas tan calientes como la inmigración», añadió.

Además, el debate suscitado esta semana por la propuesta de PSC e ICV sobre el derecho a voto de los inmigrantes no comunitarios es otro de los temas que preocupan a Mas. Según el líder convergente, el tema se ha tratado «con una frivolidad y demagogia inmensas», sin tener en cuenta factores que el líder de CiU considera imprescindibles para ejercer ese derecho como «la nacionalidad, el arraigo y el sentido de pertenencia», tres requisitos que para Mas «son el primer paso» hacia el derecho a voto.

«No se puede comenzar la casa por el tejado», subrayó el líder nacionalista, «es un error igual de grave que el de hace unos años, cuando las mismas fuerzas políticas pidieron papeles para todos». Mas mostró su satisfacción por la «marcha atrás» efectuada por el Gobierno, recordó lo «decisiva» que ha sido la presión de CiU en el asunto y calificó la posibilidad de que los inmigrantes regulares puedan votar en las elecciones municipales es una «tontería» de la «izquierda oxidada en la que estamos instalados».