Segundo mes consecutivo en el que la inmigración es, para la ciudadanía, el principal problema de España, según el barómetro de octubre hecho público este lunes del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). En septiembre esta cuestión se convirtió por primera vez en el principal problema del país. Desde los últimos datos, además, la vivienda ha subido de la sexta a la tercera posición como principal problema de España, según la encuesta.

El análisis se realizó a la población española de ambos sexos de 18 y más, con 4.005 entrevistas, del 1 al 11 de octubre. En la pregunta se pide a los encuestados que mencionen de manera espontánea el primero, segundo y tercer problema del país. Con un 28,1% de menciones en total, la inmigración se sitúa en primera posición. Le siguen la crisis económica (23,8%) y la vivienda (22,7%). Por detrás están el paro (22%), los problemas políticos en general (18,6%) y los problemas relacionados con la calidad del empleo (13,9%).

Los datos cambien si, en vez de preguntar por el principal problema de España, se pregunta por el problema que más afecta personalmente a cada encuestado. En este caso, con un 33,8% de las menciones, el principal problema es la crisis económica, y la inmigración cae hasta la sexta posición con un 10,8% de menciones.

Preguntados también por la afectación personal del problema, la vivienda, que en septiembre ocupaba la cuarta posición (15,3%), en octubre ha subido hasta la tercera con un 17,7% de menciones.

Son cifras que llegan después de un verano en el que la crisis migratoria ha sido protagonista por la incapacidad de los grupos políticos de ofrecer una respuesta para gestionar esta cuestión. En este mismo sentido, la preocupación por la vivienda sigue creciendo ante el aumento de precios que se ve reflejado en las movilizaciones ciudadanas como la de la semana pasada en Madrid o la que se produjo ayer mismo en Valencia.