Lufthansa, la aerolínea insignia de Alemania, ha recibido una multa récord de cuatro millones de dólares del Departamento de Transporte (DOT) de Estados Unidos por las acusaciones de discriminación contra un grupo de pasajeros judíos.

El regulador afirmó este martes que la compañía había prohibido a 128 viajeros que vestían ropas judías ortodoxas tradicionales embarcar en un vuelo de conexión en Alemania mientras se dirigían de Nueva York a Budapest (Hungría), en el 2022.

Este castigo es el más alto impuesto por el DOT contra una aerolínea por vulneración de los derechos civiles.

“Ante la supuesta mala conducta de algunos pasajeros, Lufhansa los trató a todos como si fueran un solo grupo y les negó el embarque”, señaló la administración estadounidense. La empresa actuó así a pesar de que muchos de esas personas no se conocían las unas a las otras ni viajaban juntas.

Algunos de esos viajeros contradijeron las normas de la aerolínea al negarse a llevar la mascarilla. Un vídeo de aquel momento muestra como el personal de Lufthansa les dijeron a los pasajeros que “todos han de pagar por el error de unos pocos”. Y definieron ese todos como “judíos que venían del JFK.

En aquel momento, los medios alemanes reportaron que la aerolínea denegó el embarque a una serie de personas a partir de que llevaran sombreros o patillas largas.

“Nadie debe sufrir discriminación cuando viaja y esta sanción envía hoy un claro mensajes a la totalidad de la industria de las aerolíneas de que estamos preparados para investigar y emprender acciones siempre que se violen los derechos civiles de los pasajeros”, remarcó en un comunicado el secretario de Transporte, Pete Buttiegieg.

Previamente, la administración Biden consideró que el trató que recibieron esas personas era “inconcebible”. La terrible ironía, matizaron, y los más escandaloso, es que esto procediera de una aerolínea alemana.

En otro comunicado, Lufthansa expresó este martes su máxima colaboración con el DOT mientras se produjo la investigación y que había estado en contacto con el Comité Judío Americano a raíz de este incidente.

“A través de nuestra cooperación continua, hemos creado un programa de formación único en su tipo en la industria de las aerolíneas para nuestros que nuestros encargados y empleados afronten el antisemitismo y la discriminación”, indicó en su respuesta. “Lufthansa se dedica a ser un embajador de la buena voluntad, tolerancia, diversidad y aceptación”, añadió.

Cuando sucedió, la compañía pidió disculpas por el incidente y aseguró mantener una política de “tolerancia cero” con el racismo, el antisemitismo y las discriminaciones de cualquier tipo.