Trump suma voto latino con el respaldo de artistas de reguetón

Trata de seducir con promesas económicas a hispanos de segunda y tercera generación

ABC, David Alandete Corresponsal en Washington, 26-09-2024

Es raro que, a estas alturas de una campaña electoral en Estados Unidos, a menos de siete semanas de la votación, el candidato demócrata dedique tanto tiempo y recursos a cortejar el voto hispano. Sin embargo, en esta campaña inusual, el republicano que ha prometido deportaciones masivas está por delante de la demócrata en las encuestas de intención de voto hispano. Por ello, Kamala Harris ha tenido que ajustar su discurso, buscando atraer suficientes apoyos entre los latinos para asegurarse la victoria en los estados clave.

El jueves, aquí en Washington, Harris pronunció un discurso ante una reunión de políticos, empresarios y activistas hispanos, la élite de este grupo demográfico, prometiendo «una solución para un sistema migratorio roto». Su principal propuesta fue otorgar la ciudadanía a los inmigrantes indocumentados que llegaron a EE.UU. siendo menores —conocidos como ’dreamers’—, siempre que cumplan una serie de requisitos. Se trata de una iniciativa ya conocida, que requiere la aprobación del Capitolio, y que Harris presenta tras casi cuatro años en la Casa Blanca, en un periodo en el que la crisis migratoria se ha agravado.

La razón por la que los demócratas están enfocándose en el voto latino es un sorprendente sondeo de Marist realizado para PBS y NPR, que muestra cómo Trump ha logrado un avance notable entre los votantes latinos, pasando de estar 15 puntos detrás de Kamala Harris en agosto a liderar con un 51% frente al 47%, lo que supone un giro de 19 puntos. Entre los votantes independientes, Trump también ha revertido la ventaja de Harris, ahora superando a esta con un 49% frente al 46%, representando un cambio de 14 puntos desde agosto.

Las encuestas pueden variar con frecuencia, pero las más recientes muestran que Trump cuenta con más apoyo entre los latinos independientes que residen en estados clave como Arizona, Nevada y Pensilvania, especialmente entre los hombres. Los encuestados citan principalmente la inflación y las dificultades en el mercado laboral como las razones para respaldar al republicano.

El censo estima que 36,2 millones de latinos estarán habilitados para votar en las elecciones presidenciales de 2024, un aumento de casi 4 millones respecto a 2020, según datos del Centro de Investigaciones Pew, que hace las estimaciones mas fiables. Los latinos ya constituyen el 15% del electorado, superando a los afroamericanos. Sin embargo, agruparlos como un bloque homogéneo es un error, ya que, a medida que crecen en número, conforman un grupo cada vez más diverso, con preferencias políticas distintas.

Cambio generacional
Hay divisiones de procedencia —no vota lo mismo un exiliado cubano o venezolano en Miami que un inmigrante mexicano en Santa Fe— pero también generacionales. De hecho, Mike Madrid, uno de los estrategas latinos más influyentes en la política estadounidense cree que el cambio generacional en intención de voto tiene la fuerza de un terremoto. Según afirma, «la diferencia política entre un latino de primera y segunda generación es un cambio bastante grande».

«El salto de la segunda a la tercera generación es tectónico. Y en los últimos diez años hemos empezado a ver un crecimiento notable en los votantes latinos de tercera generación y ahora, de manera visible, de cuarta generación. Así que se oye a muchos encuestadores y analistas decir que el problema está en los hombres hispanos nacidos en EE.UU. Y es cierto. El giro a la derecha está ocurriendo, y no es algo gradual, está explotando», afirma.

Dada esta realidad, la campaña de Trump está haciendo lo mismo que la de Harris, tratar de incluir promesas para los hispanos en sus mítines, algo que debe reconciliar con sus promesas de deportaciones masivas y acabar con el régimen de asilo. En eso, el candidato republicano lo que hace es prometer mejoras económicas y en el mercado de empleo.

‘Qué mala Kamala’
Además, ha contado con el respaldo de dos reconocidos reguetoneros, Nicky Jam y Anuel, y ha comenzado a reproducir en sus mítines una canción de salsa de Dark Latino Groove, publicada en 1997, que modifica el estribillo original de ‘Qué mala Juliana’ por ‘Qué mala Kamala’. Al ser consultada sobre esta versión, la campaña de Trump afirmó que su intención es destacar que «los hispanoamericanos han sido dejados atrás» por Harris y el presidente Joe Biden.

Esta lucha por el voto latino es crucial, ya que solo unos cientos de votos en algunos estados clave podrían definir al ganador. En Nevada, los hispanos representan el 22% del electorado; en Arizona, el 25%; y en Georgia y Pensilvania, el 6%, cifras suficientes para considerarlos decisivos.

Según el último estudio del Centro Pew, el 55% de los hispanos cree que Trump gestionaría mejor la economía, y un sorprendente 52% afirma que su política migratoria sería más eficaz que la de Harris. Esto contradice las suposiciones de los demócratas, quienes creen que los latinos, especialmente los de segunda y tercera generación, favorecen políticas de asilo más generosas. Por el contrario, una mayoría opina que las restricciones de Trump mejorarían para ellos el mercado laboral y las oportunidades económicas.

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