El día después de que ocho migrantes murieran al tratar de cruzar el canal de la Mancha, el primer ministro británico, Keir Starmer, se ha reunido en Roma con su homóloga italiana, Giorgia Meloni, donde ha aplaudido los avances “notables” de Italia en materia migratoria.

Pese a que Starmer ha rechazado el plan del anterior gobierno conservador del Reino Unido de deportar migrantes a Ruanda, el laborista ha dicho estar muy interesado por el acercamiento al reto migratorio de la primera ministra italiana, que ha puesto en marcha un controvertido acuerdo con Albania para trasladar a personas rescatados en sus aguas que algunas organizaciones humanitarias han comparado con el anterior plan británico.

El laborista indica que se quiere acercar al ejemplo italiano con “pragmatismo británico”
“Italia ha conseguido progresos notables trabajando con los países de la ruta migratoria, afrontando las causas profundas de la inmigración y reduciendo las llegadas irregulares”, ha sostenido el premier británico, mostrando sintonía con Meloni, que también tenía una gran complicidad con su antecesor, Rishi Sunak.

Starmer ha destacado que en este año se han reducido en Italia las llegadas en un 60% –especialmente por la bajada de las salidas desde Túnez, país con el que la UE llegó a un acuerdo de financiación a cambio de más control a los traficantes– y ha argumentado que al venir a Roma quería afrontar esta cuestión con “pragmatismo británico” para aprender de su ejemplo. “Somos pragmáticos por encima de todo. Cuando vemos un reto, comentamos con nuestros amigos y aliados los distintos enfoques que están probando, mirando cómo funcionan, y eso es lo que estamos haciendo hoy”, ha explicado.

Meloni, visiblemente satisfecha de la reacción de su homólogo en el Reino Unido, ha sacado pechopecho de la construcción de sus centros en territorio albanés. “Estamos de acuerdo en que no hay que tener miedo a explorar soluciones nuevas. Hemos hablado del ‘Protocolo Italia-Albania’, por la que el Gobierno de Reino Unido muestra mucha atención y le hemos brindado todos los elementos para comprender este mecanismo innovador”, ha declarado la líder de Hermanos de Italia. Aunque en un principio los centros debían abrir el 1 de agosto, “todavía falta alguna semana” para que estén listos, contó Meloni.