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El canal de La Mancha no para de cobrarse vidas de inmigrantes ilegales. Este domingo ocho simpapeles perecieron y seis resultaron heridos, entre ellos un bebé, al naufragar la embarcación en la que intentaban llegar al Reino Unido desde Francia, con lo que la cifra de fallecidos en lo que va de año es de 45, según los registros de la Organización Internacional de Migraciones (OIM). Un récord de fallecidos por partida doble, ya que este año se han multiplicado por cuatro (en el 2023 fueron 12), y es la cifra más elevada desde el 2021. Solo el sábado, 801 personas lograron llegar a las islas británicas en endebles embarcaciones, de acuerdo con las cifras suministradas por el Gobierno británico.

«En tierra, en la playa, los servicios de emergencia atendieron a 53 migrantes y, a pesar de la atención de emergencia brindada, lamentablemente confirmaron la muerte de ocho de ellos. No se descubrieron náufragos durante las búsquedas en el mar», según un comunicado la prefectura de la Mancha recogido por Efe.

Durante la noche del sábado al domingo, poco antes de la medianoche, una embarcación con numerosos migrantes a bordo fue avistada cerca de la costa de Ambleteuse, tras lo que las autoridades fletaron un barco para llevar a cabo la vigilancia.

El prefecto de Pas-de-Calais, Jacques Billant, aportó a la prensa más detalles de este nuevo drama en el canal de La Mancha, el segundo este mes después de los 12 muertos registrados el pasado 3 de septiembre en circunstancias similares.

«A pesar de las tentativas de reanimación, ocho personas han muerto, se tratan, en principio, de hombres mayores de 18 años», dijo Billant, quien explicó que la embarcación que contaba con otros 51 pasajeros se deshizo al chocar contra unas rocas. El alto funcionario constató que hay seis heridos en «urgencia relativa» ingresados en dos hospitales de la zona, entre ellos un bebé de 10 meses afectado por hipotermia.

El delegado del Gobierno contabilizó seis nacionalidades diferentes entre los 59 pasajeros: Eritrea, Sudán, Siria, Afganistán, Egipto e Irán.

Pese a que el barco francés notó que la embarcación con migrantes se dirigía hacia la playa de Ambleteuse «no pudo ofrecer ninguna ayuda desde el mar». La Fiscalía de Boulogne-sur-mer ha abierto una investigación sobre el naufragio.

Por su lado, el titular británico de Asuntos Exteriores, David Lammy, tildó este domingo de «espantosa» la muerte de los inmigrantes. «Es espantoso. Es una nueva pérdida de vidas», lamentó el político laborista en declaraciones hechas hoy a la cadena pública BBC. Lammy afirmó que ha visitado la Agencia de Crimen Nacional (NCA) donde ha visto «el horroroso tipo de embarcaciones de goma en las que la gente cruza el canal y con los que muchos de ellos no lo logran, con esos artilugios».

El dirigente laborista apuntó además que el Gobierno de Londres ha estado «estudiando cómo perseguir estas bandas (de tráfico de personas) en cooperación con otros aliados europeos».

Durante este 2024, las autoridades británicas calculan que al menos 22.000 inmigrantes y demandantes de asilo han llegado a las costas del Reino Unido desde el norte de Francia, normalmente embarcando desde zonas cercanas a las ciudades de Calais y Dunkerque.