jesús iribarren

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Pamplona. Navarra está gestionando a través de Cruz Roja sin ningún tipo de problema de coordinación o alojamiento a un pequeño cupo de inmigrantes subsaharianos trasladados en virtud de un convenio con el Ministerio de Asuntos Sociales desde las Islas Canarias. Según ya adelantó en su día DIARIO DE NOTICIAS, desde julio una veintena de subsaharianos han pasado por dos pisos cedidos por el Ayuntamiento y atendidos por personal de la Cruz Roja. La experiencia está teniendo un resultado muy positivo, indicaban entonces desde ésta ONG, y no existen problemas de coordinación o traslados sin aviso como en alguna otra comunidad, confirmó ayer la consejera de Bienestar Social, Isabel García Malo. Ésta, según indicó, acudirá con voluntad de “cooperación” y acuerdo a la próxima reunión de las autonomías con el Estado para tratar estos temas y, aunque en espera de saber las condiciones, no descartó que Navarra pudiera acoger más inmigrantes y también a menores, que es dónde se están dando las mayores urgencias en Canarias. No obstante, García Malo también señaló que más allá de la solidaridad a nivel estatal lo que hay que hacer es evitar que se produzcan estas situaciones y en este sentido criticó la política migratoria del gobierno central de Zapatero.

Como ya se indicó recientemente, la acogida de inmigrantes subsaharianos en Navarra se encuadra en un convenio marco con 102 medidas. Una de ellas se refiere a pisos de acogida y se reactivó con Cruz Roja en julio aunque esta ONG y otras como Africa Etxea hayan trabajado antes este campo. Según fuentes de Bienestar Social, desde el 1 de julio a aquí han pasado por este programa 18 personas y llegarán 7 nuevos el próximo lunes. En principio hay capacidad para acoger remesas de diez personas mensuales que no se solapan ya que una vez que los inmigrantes adquieren unos conocimientos mínimos de castellano y sobre el entorno local, tratan de buscarse su propia salida personal mediante contactos con otros compatriotas o autóctonos. Las previsiones son que en lo que queda de año (que es cuando termina en principio el programa) hayan pasado por este servicio, financiado desde el Estado, unas 80 personas.