C. FIBLA
Finalmente la UE anunció ayer que entregará 67 millones de euros a Marruecos para que se organice y haga más efectiva la lucha contra la inmigración clandestina. A la partida de 40 millones de euros, solicitada hace más de cinco años por el reino alauí – cuando las autoridades marroquíes empezaron a comprobar que la situación les desbordaba- y otorgada hace sólo dos años, Bruselas añade otros 27 millones de euros.

Durante las últimas semanas, a raíz de las crisis migratorias vividas en África Occidental, la Unión Europea ha debatido una “reorientación del proyecto” inicial de blindaje de las fronteras marroquíes.

Una “mejor gestión de los flujos migratorios” es el objetivo fundamental en el que la UE quiere colaborar financiando proyectos de formación y aportando parte de la infraestructura necesaria para controlar las costas marroquíes y saharauis.

“Ahora sí que estamos construyendo la casa empezando por los cimientos – declaró ayer a La Vanguardia un alto responsable de la Comisión Europea en Rabat-. Se trata de un proyecto de urgencia en el que colaboramos en la fase inicial”.

La ayuda económica europea pretende que el Gobierno marroquí sea capaz de combatir a medio y largo plazo las oleadas de inmigración ilegal que acechan Europa.