BARCELONA.- El fin del último proceso de regularización de inmigrantes está representando una desaceleración en la creación de empleo.Tras aflorar parte de la economía sumergida durante los últimos trimestres de 2005, cuando la legalización de sin papeles estaba en pleno auge, ahora un informe de IESE encargado por Adecco asegura que ya se ha llegado al límite y que la ralentización experimentada en el segundo trimestre de 2006 tiene que ver con la ausencia de nuevas incorporaciones laborales de ciudadanos extranjeros.

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La regularización de inmigrantes permitió la incorporación al mercado de trabajo de 122.000 personas, todos ellas con la consecución de un puesto de trabajo, mientras que otras 15.000 personas que estaban en paro también lograron empleo.

«La tendencia iniciada en junio en Cataluña se consolidará durante la segunda mitad del año», reza el estudio, que prevé crecimientos interanuales del 3,9% en el tercer trimestre y del 3,1% en el cuarto y último trimestre del año. En los trimestres previos obtuvieron crecimientos del 4,9%. Pese a la desaceleración, los responsables del informe auguran una reducción del 3,6% del desempleo a final de año, el equivalente a 9.000 trabajadores.

Según los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), correspondientes al segundo trimestre, el paro en Cataluña quedó fijado en el 6,5%, el menor porcentaje de los registrados entre el resto de comunidades autónomas. Como el crecimiento del empleo seguirá en crecimientos contenidos, el paro se reducirá de forma más lenta en los últimos meses del año, y quedará fijado en el 6,2% en el mes de diciembre, según las previsiones del estudio, que mantendrán a la comunidad como la menos afectada por el desempleo.

Respecto a la distribución de los nuevos empleos por sexos, los hombres se han beneficiado del 53,5% de los nuevos puestos de trabajo durante los últimos 12 meses (72.000 plazas), mientras que las mujeres captaron 65.000 empleos, es decir el 47,5%, que es el menor porcentaje de los últimos 13 trimestres.

Según el informe, durante la segunda mitad del año el empleo masculino en Cataluña crecerá de forma más rápida que la media nacional, mientras que el empleo femenino lo hará más lentamente.En la primera mitad de 2006, la construcción ha sido la gran demandante de mano de obra en Cataluña, al absorber cerca de 50.000 empleos y afectando, sobre todo, a hombres. Ese papel le permitió superar por primera vez los 400.000 empleados en junio.

Respecto al empleo juvenil, Cataluña ha sido una de las tres comunidades autónomas que ha destruido empleo en los últimos 12 meses de junio de 2005 a junio de 2006, concretamente 4.000 puestos, lo que supone una caída interanual del 1,3%. El estudio de IESE prevé que se invierta la tendencia y que el empleo adulto se ralentice en favor de la ocupación de los menores de 25 años.