Ciudadanos | Claudio Munoa Fagoaga
«Un tapón se transforma en joya y da de comer a la gente que llegó a Lesbos»
La botella que ese tapón cierra saldrá en enero a subasta solidaria
Diario Vasco, , 26-07-2024Mediodía del día de Santa María Magdalena en la calle Aldamar. Tocas el timbre en la puerta de Casa Munoa. Te recibe el nieto de Claudio Munoa y Purificación Roiz, el hijo del exquisito dibujante Rafael Munoa. Te recibe Gonzalo Lapazarán, que también es de linaje noble pues tío suyo fue Vicente Zaragüeta. En el taller, tres artesanos joyeros sin igual, Carlos, Félix Torres y Ane Ochoa. En la biblioteca, libros antiquísimos sobre las medidas y el peso de los diamantes y la obra, excelsa, de Rafael sobre la platería española. En las vitrinas, un camafeo con Diana Cazadora silueteada en conchas marinas y un dije esmaltado fechado entre los siglos XVII y XVIII. En los estuches exquisitos, el colgante que se ha convertido en la enseña popular de la Casa, el ‘Donostia Bay’. En el salón, unos clientes californianos. Nada de eso es el objeto de nuestra visita. Lo es una botella de gres con el nombre de su diseñador, MKM, grabado y la firma (‘CM’), tallada con láser en bajorrelieve y pintura dorada, del joyero que la ha convertido en joya.
–Oro de 18 quilates en granos. Una gema granate en bisel. 20 tsavoritas. Interior en lámina chapada en oro en forma de flor que crea huecos para acoplamiento y también abre luz por la parte posterior… ¿Es eso un tapón? ¿Un tapón de botella de gres? ¿Un tapón de botella de gres que saldrá a subasta en enero, junto a otras muchas, con un objetivo de solidaridad hacia la gente acampada en la isla donde vivió Safo, la poeta? Cuenta.
– Unos cuantos artistas (de la gastronomía, la moda, el diseño, la literatura, el dibujo, el arte floral) hemos sido convocados para diseñar, repujar, embellecer unas botellas que, acabas de escribirlo, serán subastadas en Madrid en beneficio de Zaporeak, la ong que ofrece comida digna a los refugiados que llegan a la isla de Lesbos. Intentan que los que están allá coman sano, saludable y alimentos a los que están culturalmente acostumbrados (ni piperrak, ni txipirones; humus, fruta, carne halal…). Cada comida sale por un euro, euro y medio. Atienden a 3.000 personas diariamente;es fácil hacer las cuentas…
«Hay gente que desprecia el lujo. Sin entender que el oro es patrimonio monetizable y el dinero en movimiento impulsa la economía y mantiene oficios que sin esa pasión por lo hermoso y caro se perderían para siempre»
– Con lo cual, está bien ajustado el precio de salida de cada botella en la subasta…
– Bien cierto, estará en 2.500 con lo cual, teniendo en cuenta que habrá pujas, cada botella pagará, más, menos, la comida de un día de esas 3.000 personas.
– ¿Cómo pensaste, planteaste, ideaste, soñaste la tuya?
– Yo no dibujo como mi padre. Yo no pinto. Yo soy joyero. Quería, podía, debía hacer una joya. Por otro lado, deseaba que fuera también mi propio donativo. De ahí emplear los materiales preciosos que rodean mi oficio. Sin embargo, no quería…
– ¿Qué?
– Que quien se hiciera con ella, particular, empresa o institución, la colocase en una vitrina, en una estantería, tras una cristalera. Deseaba que fuera una joya, que se pudiera lucir. Así que…
–… Creaste un tapón que se convierte en… ¡colgante!
– Justo. Un tapón a rosca, un homenaje al sol que calienta las viñas. Por eso se diría una cúpula que surge de un círculo de oro amarillo, el color del dios Ra. De ahí que, porque también quería celebrar a la vid, a la uva, al vino, la gema que elegí fuese el granate. Su nombre viene del latín ‘granatus’ (grano o semilla) por la forma redonda de las piedras en crudo y por la semejanza a las semillas rojas de la granada. No es solo de color rojo y se extrae en India, Kenia, Madagascar, Mozambique, Nigeria, Sri Lanka y Tanzania. Su uso en la orfebrería es eterno. Desde Gracia a los reyes húngaros. Los pueblos escandinavos lo usaban como ornamento de los guerreros muertos camino hacia el Walhala…
– Admirada por hebreos, musulmanes y cruzados. Por el contrario, las tsvaoritas que adornan tu colgante, verdes para recordar las hojas de las parras, son descubrimiento reciente. Yo creía que las gemas eran las que son desde los tiempos primeros.
– ¡No! Se van encontrando.Pero algunas tienen solo uso científico o industrial y no en la orfebrería. El diamante tiene los tres, algunas gemas, no. Quienes las descubren han de comprobar que al ser talladas resulten bellas…
– La tsavorita pasó el corte…
–Así es. Se descubrió en los años 70 del siglo XX. ‘Tsavorita’ es el nombre comercial de una variedad de, precisamente, el granate y evoca el gran parque nacional de Kenia, el Tsavol. La descubrió un geólogo escocés legendario Campbell R. Bridges. Otra gema encontrada en nuestros tiempos es la tanzanita,piedra de un color azul violeta intenso y casi único. Podríamos hablar de los ópalos de Australa, de una extraordinaria belleza y rareza . O de los zafiros de Montana que suelen ser de un hermoso verde azulado aunque algunos son amarillos.
– Hermosa la idea de que la belleza, el lujo, las materias preciosas puedan ser solidarias.
– ¡Cuántas vidas han salvado! Aquellas gentes que huían de los nazis con algunos diamantes escondidos en el forro del abrigo… Esos dientes de oro empeñados…
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