La afluencia de inmigrantes tiene su lógico impacto sobre el mercado laboral. El informe que acompaña al Indicador Laboral de Comunidades Autónomas (ILCA) que elaboran la escuela de negocios IESE y la empresa de gestión de Recursos Humanos Adecco, señala que el proceso de regularización de inmigrantes explica el hecho de que el ritmo de creación de empleo se haya moderado en Cataluña durante el segundo trimestre de este año.

De un crecimiento del empleo del 4,9% registrado en marzo pasado, el ritmo ha bajado al 4,2% en junio, y se prevé que la tendencia continúe a la baja: el crecimiento con vistas al tercer trimestre del año se estima en el 3,9%, y en el 3,1% a finales de año. “El motivo de esta desaceleración puede basarse en que, desde el segundo trimestre de 2005, las cifras de empleo han estado influidas por el proceso de regularización de inmigrantes y, por tanto, el menor número de contratos puede deberse al final de aquel impacto”, señala el informe. Pese a todo, 122.000 personas que se incorporaron al mercado laboral encontraron empleo, y lo mismo les ocurrió a 15.000 personas que estaban en paro. Pero fue la reducción del desempleo menos importante en nueve trimestres.