Al otro lado de la muga, en Hendaia, no había este lunes grandes sorpresas por la victoria de la extrema derecha de Marine Le Pen. Iparralde no fue la excepción y su mapa político fue un reflejo de lo que ocurrió en el resto del país. El partido Agrupación Nacional arrasó en los tres territorios vascofranceses y fue la fuerza más votada en 92 de los 158 municipios. Ante estos resultados el presidente francés, Emmanuel Macron, anunció el mismo domingo por la noche la disolución de la Asamblea y la convocatoria de elecciones legislativas. Sin ningún tipo de tapujos, los vecinos hendaiarras apuntaban este lunes las claves del éxito de la ultraderecha: la seguridad y la inmigración.

El ayuntamiento de la ciudad fronteriza todavía conservaba los carteles electorales. Las paredes del edificio estaban cubiertas por las caras de los candidatos, algunos de ellos desgastados por las inclemencias climatológicas y arrancadas, quien sabe si por ciudadanos descontentos. El domingo los hendaiatarras dieron la victoria a Agrupación Nacional con el 21,5% de los votos, seguido de cerca por el Partido Socialista con un 19,9% y relegaron al tercer puesto a Renaissance —la formación de Macron— que en 2019 el grupo más votado.

La formación de Le Pen ha duplicado sus votos en Iparralde en los últimos 10 años. Agrupación Nacional obtuvo 13.256 votos en las elecciones del 2014, 17.415 en las del 2019 y 29.516 en las actuales. Un crecimiento progresivo durante la última década.

El pensionista Isidor Thaead paseaba este lunes por Hendaia sin mostrar especial sorpresa por los resultados de las elecciones. Tampoco expresó indignación ni entusiasmo. «El domingo no fui a las urnas, hace ya seis años que no voto», admitía. En todo caso, entendía la decisión que ha tomado una parte importante de los franceses al apoyar a la ultraderecha. «La gente ha votado a Le Pen porque en este país no hay justicia», afirmaba alto y claro. «Estamos viendo que la gente no recibe penas ejemplares por cometer crímenes. No se castigan los delitos y hay una total impunidad», opinaba. Eso sí, este vecino de San Juan de Luz matizaba que no había visto un «un aumento de la criminalidad en Euskal Herria». «Pero estoy seguro de que acabará sucediendo aquí y eso provoca miedo. En Baiona ya está sucediendo», aclaraba. Si bien afirmaba que hay gente que pone el foco en las personas llegadas desde otros países, resaltaba que la «impunidad» se da con inmigrantes y personas francesas.

«La gente está votando a la ultraderecha porque en este país no hay justicia. No se castigan los delitos, hay impunidad»
Isidor Thaead

Vecino de San Juán de Luz

En la turística localidad costera en la que reside Thaead también ha ganado la Agrupación Nacional. En San Juan de Luz los resultados han sido muy apretados, ya que la ultraderecha se ha impuesto al partido de Macron por apenas un punto. Los socialistas en tercera posición, a cuatro puntos de la cabeza.

En las escaleras que dan entrada al consistorio de la localidad fronteriza esperaba la hendaiarra Laurie Milan. Sin querer desvelar cuál fue su opción para las elecciones europeas se mostraba escéptica con la palabra de los políticos y «creo que juegan con nosotros». Esta mujer señalaba que «el apoyo a la ultraderecha seguirá creciendo» y cree que «los medios de comunicación han metido miedo a la gente». Milan apuntaba a la teoría de que Macron habría propiciado el auge de la extrema derecha y no tiene dudas de lo que pasará en las próximas elecciones francesas. «El presidente ha dejado el gobierno en manos de la extrema derecha para que la gente lo pase mal y los partidos de centro se refuercen y vuelvan a tener el poder». Y subrayaba que la inmigración «es una preocupación real» para los franceses.

«Tengo dudas de que Marine Le Pen tenga la inteligencia para gobernar un país como Francia»
Antoine Neves

Vecino de Hendaia

De orígenes portugueses, Antoine Neves, dejaba claro que no es una persona con especial interés por la política. De todas formas, apuntaba que el principal motivo para votar a la extrema derecha ha sido «la seguridad». «La principal batalla es la lucha contra los inmigrantes», explicaba. Neves señalaba que podía entender por qué se ha producido la victoria de Marine Le Pen, «aunque dudo de que tenga la inteligencia para gobernar un país como Francia». Tras este comentario mostraba su «total» incertidumbre sobre lo que pueda pasar en las próximas elecciones legislativas.

Movilizaciones
Tras la victoria de la extrema derecha, ciudadanos y movimientos sociales se manifestaron este lunes por las calles de Baiona y de Pau. El sindicato Solidaires 64 y el partido NPA (Nuevo Partido Anticapitalista) fueron algunos de los grupos convocantes que mostraron su oposición al partido de Marine Le Pen. El sindicato llamó «a los trabajadores del país a oponerse con todas sus fuerzas a la extrema derecha. Para ello, pedimos que los empleados se reúnan en el lugar de trabajo lo más rápido posible».

Para el NPA, «el desafío es recuperar el control en un contexto de crisis económicas, sociales, democráticas y ecológicas que se combinan y amplifican. Todas las fuerzas de izquierda que rechazan este sistema social y ecológicamente destructivo deben unirse para resistir en las urnas y en las calles a la extrema derecha y al macronismo que la alimenta».