Líderes musulmanes británicos condenan la expulsión de pasajeros de un avión por tener rasgos árabes

La Voz de Galicia, 22-08-2006

La decisión de bajar por la fuerza a dos hombres con rasgos árabes de un avión antes de que despegara del aeropuerto español de Málaga rumbo a la ciudad inglesa de Manchester fue condenada ayer por líderes musulmanes de Gran Bretaña. La expulsión de los pasajeros se realizó después de que otros ocupantes del avión expresaran su temor a que fuesen terroristas.


Mohammad Sarwar, parlamentario laborista por Glasgow (Escocia), dijo que «situaciones así demuestran que las comunidades musulmana y occidental se están separando». Khalid Mahmood, también parlamentario laborista por Birmingham, aseguró que «lo que está ocurriendo es completamente irracional, y la gente necesita retomar el juicio».

El superintendente de Scotland Yard, Ali Dizaei, uno de los policías musulmanes de mayor graduación, advirtió contra los problemas de manejar información y hacer los registros en función de la etnia o la religión de las personas. «El mayor peligro es que los extremistas han conseguido convencer a los árabes y a los musulmanes de que la guerra contra el terror no es contra los terroristas, sino contra ellos», dijo.


Las amenazas de Londres


Por otra parte, Scotland Yard acusó ayer formalmente a 11 de los 23 detenidos hace diez días por preparar un plan para hacer estallar varios aviones en pleno vuelo entre el Reino Unido y Estados Unidos. Uno de los inculpados apenas tiene 17 años. Otros once continuaban ayer en comisaría y una mujer fue puesta en libertad sin cargos.


Ocho de los acusados lo son por conspiración para el asesinato y por preparar actos terroristas; dos han sido acusados por no cooperar con la policía, y el adolescente de 17 años, por posesión de manuales con los que poder preparar atentados terroristas. También fue acusada otra mujer, madre de un bebé de ocho meses.

El jefe del departamento antiterrorista de Scotland Yard, Peter Clarke, destacó al informar sobre las acusaciones presentadas por la policía que primero contaban con evidencias «de las operaciones de seguimiento e investigación desde el 10 de agosto, entre las que se incluyen grabaciones de vídeo y audio altamente significativas». Y añadió: «Desde el 10 de agosto hemos hallado equipos para la composición de artefactos explosivos, productos químicos, entre ellos hidrógeno de peroxine, componentes eléctricos, documentos y otros objetos».

Clarke confirmó a su vez que también «se han encontrado grabaciones de vídeo, vídeos de mártires, y todo eso ha dado una idea muy clara del supuesto complot». «Tenemos que ser realistas, la amenaza terrorista es real», agregó.

Susan Hemming, directora de la división antiterrorista de la Fiscalía General del Estado, indicó que los once detenidos permanecerán en custodia y bajo investigación para comprobar su grado de peligrosidad. «No podemos adoptar todavía una decisión sobre si habrá más acusaciones ni cuándo», dijo.

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