Euskal Herriko Kontseilu Sozialista (EHKS) ha puesto sobre la mesa su estrategia abstencionista de cara a las elecciones europeas que se celebran el próximo 9 de junio. El partido que nació en diciembre del seno del Mugimendu Sozialista que apareció hace un lustro como GKS anunció hace unos días que esa será su posición, y ahora ha convocado una manifestación en Donostia para «deslegitimar la Unión Europea» y su «agenda política basada en la guerra y la austeridad de las oligarquías occidentales». Una movilización que se llevará a cabo el día 7 de junio, coincidiendo con el último día de la campaña electoral y los actos de cierre de los partidos políticos vascos.

Este partido de ideología comunista ha conseguido aglutinar a una potente masa social en Euskadi alrededor del Mugimendu Sozialista, sobre todo de personas jóvenes, y ya demostró el Primero de Mayo en Bilbao que tiene capacidad de convocatoria. Suya fue una de las manifestaciones con mayor afluencia. Con un discurso de rechazo contra «los políticos profesionales» y las propias instituciones, no tienen pensado participar a corto plazo en procesos electorales. En las elecciones de abril al Parlamento Vasco no se movilizaron, al contrario que ha sucedido en esta ocasión.

A través de un video publicado en redes sociales, el portavoz de EHKS, Peio Ormazabal, ha explicado que «la Unión Europea es directamente responsable del genocidio de los palestinos, porque mientras denuncia los abusos de Israel para mantener las apariencias, por el otro legitima y arma al Estado sionista».

De todos modos, aclara que la guerra no solo se limita a Palestina. «Sabemos que las guerras solo responden a los intereses de los poderosos y los principales perdedores somos siempre los trabajadores. Por eso no oponemos al rearme de Europa».

En ese sentido, aclaraban que «ese rearme impulsado por la OTAN ya afecta a nuestras vidas porque se paga del bolsillo de los trabajadores» y es que, «la otra cara de la moneda es el encarecimiento de la vida y la austeridad, porque el dinero que se destina a armas se deja de invertir en sanidad o educación». Y critican que estas políticas «las están aplicando tanto gobiernos de izquierdas como de derechas».

«Detener la ultraderecha»
Ormazabal critica que «la socialdemocracia nos pida el voto para detener el auge de la ultraderecha, pero cuando están el gobierno no hacen nada para parar al fascismo y crean las condiciones objetivas para su crecimiento». Y cree que «la propia Unión Europea es una de las instituciones que utiliza el fascismo cuando le interesa, por ejemplo promoviendo políticas contra los migrantes».

Con este contexto, EHKS considera que «el cambio no pasa por influir en una Unión Europea al servicio de los grandes banqueros y de los empresarios, al contrario, es imprescindible deslegitimar a la UE y organizar la solidaridad internacional entre los trabajadores contra nuestro enemigo común: la burguesía y el capitalismo».