Roma. (EFE). – Una barcaza con unos treinta inmigrantes a
bordo ha naufragado hoy frente a las costas de Lampedusa, informaron
las autoridades italianas, que indicaron se han rescatado ya a diez
de ellos y recuperado cinco cadáveres, mientras se busca a los
quince desaparecidos.

Se trata de la segunda tragedia vivida en las últimas 48 horas en
las inmediaciones de Lampedusa, la isla más meridional de italia, a
la que casi a diario llegan decenas y en ocasiones centenares de
inmigrantes.

Un barco pesquero que faenaba hoy en aguas del Mediterráneo vio
como zozobraba la barcaza en la que viajaban treinta inmigrantes,
todos ellos procedentes de Eritrea, y socorrió a diez de ellos.

Los supervivientes han narrado que eran unos 30 a bordo de la
nave, que habían partido hacía cinco días y se habían quedado sin
gasolina ni comida el segundo día de navegación.

Tras el aviso del pesquero los guardacostas italianos comenzaron
las tareas de recuperación y rescate, aunque hasta el momento no han
encontrado más supervivientes.

Los servicios de auxilio continuaban además hoy en busca de algún
posible superviviente o de los cuerpos de los cuarenta desaparecidos
ayer tras el naufragio de otra barcaza en la que viajaban unas 120
personas.

Setenta de ellas fueron salvadas, entre ellas cinco que luego
fueron detenidas como presuntos traficantes de personas.

Pero el goteo de barcazas con inmigrantes que intentan llegar a
Europa ha proseguido durante todo el fin de semana y ésta mañana
habían llegado otras 93 en dos barcazas, de los que solo 37 lo
consiguieron por sus propios medios, mientras el resto fue socorrido
por los guardacostas. Durante la tarde de hoy llegó otra barcaza con 25 personas más.

El ministro del Interior, Giuliano Amato, calificó la tragedia
como un acto criminal e hizo un llamamiento a la persecución de las
organizaciones dedicadas al tráfico clandestino de personas.

Con anterioridad, las autoridades italianas habían atribuido la
masiva llegada de inmigrantes, en su mayoría procedentes de Libia,
al refuerzo del cierre de las fronteras en las ciudades españolas
africanas de Ceuta y Melilla.

Sin embargo, el diario Corriere della Sera señalaba hoy que la
llegada masiva de inmigrantes a las costas de las islas Canarias
(sur de España) desmiente esa teoría.

Para el rotativo, las oleadas de personas que intentan
desesperadamente alcanzar las costas de Italia y España evidencia
“la falta de un acercamiento común de la Unión Europea sobre las
causas que generan el flujo migratorio, principalmente la disparidad
de riqueza entre Europa y Africa”.