Correos se actualiza. El tráfico de certificados y paquetería será más eficaz durante los próximos meses. Varias oficinas vitorianas pondrán en marcha una nueva iniciativa que conectará a la ciudadanía con el servicio postal mediante la digitalización. El proyecto, que parte del concepto de trazabilidad, consiste en buena parte en realizar un seguimiento de los envíos ‘on line’. Es decir, una vez mandada la carta el remitente podrá consultar en la web de Correos en qué punto exacto del recorrido se encuentra su certificado introduciendo el código de barras asignado.

Los carteros cambiarán de este modo su libreta por un PDA – asistentes portátiles digitales con conexión Wi – Fi y digitalización de imágenes – , donde introducirán toda la información de los envíos para transmitirla a los clientes vía Internet o teléfono móvil. Será la Unidad de Servicios Especiales (USE) – los carteros de repartos urgentes – quien comience a probar estos nuevos aparatos por toda la ciudad, con base en el centro de clasificación de Los Huetos.

«Si la experiencia es positiva, se trasladará a las demás oficinas de la capital», aseguran desde la jefatura de cartería de la Oficina de Correos de Vitoria, aunque aún observan la novedad con cautela.«Los datos se transmitirán mucho más rápido, y se evitarán trámites administrativos, por lo que se agilizará el servicio y se ofrecerá una mejor atención al ciudadano», apostillaron. Así, el soporte papel pasará al código binario y la firma electrónica reemplazará al autógrafo, que «ahorrará papeleos y mejorará la calidad del servicio y la rapidez en los plazos de entrega». Esta experiencia piloto, que se encuentra en fase experimental en Madrid y Toledo, se implantará en la capital alavesa durante los próximos meses.

«Mas fiable»

La sociedad estatal distribuyó más de 45 millones de cartas en Álava durante 2005, y ha ido incrementando los repartos en los últimos años, lo que afianza su posición frente al auge de Internet.

«El e – mail no es un competidor para la mensajería tradicional, ya que se utiliza principalmente para enviar cartas personales o ‘spams’ – boletines publicitarios – y no a nivel comercial, principal labor de Correos en la actualidad. A nivel personal supone un porcentaje muy pequeño, ya que constituye apenas el 4% de los envíos», afirmó un portavoz de la oficina central de Correos.

Muchos de los paquetes que se transportan son libros y discos que se compran por Internet, por lo que en esa medida, incluso ha beneficiado a la empresa.

El e – mail sigue sin desbancar a la carta cuando se trata de información importante. Cientos de inmigrantes que cada día se amontonan en la céntrica oficina de la calle Postas lo demuestran.

«Venimos todos los meses, tanto para enviar como para recoger correspondencia», afirman las colombianas Natalia Ortiz y María Betancourt. Abdul y Ahmed, de Marruecos, están persuadido de que «es más fiable que el correo electrónico».