Suma y sigue. Las costas canarias han recibido en los últimos dos días una de las mayores avalanchas de inmigrantes indocumentados en lo que va de año. En poco más de 48 horas, los equipos de emergencia y seguridad del archipiélago tienen constancia de la llegada de 11 cayucos ocupados por 836 personas. A lo largo de esta madrugada estaba prevista la llegada de al menos tres embarcaciones más, por lo que la cifra superarará el millar de ‘sin papeles’. Algunos de ellos tuvieron que ser hospitalizados con síntomas de agotamiento y deshidratación, fracturas o hipotermia.

El punto de llegada fundamental fueron distintas calas o puertos de la isla de Tenerife, aunque otras embarcaciones recalaron en el litoral de Hierro y La Gomera, como también ocurrió durante la jornada del viernes, cuando se registró otro desembarco masivo que dejó en este archipiélago a 512 extranjeros. Así, los últimos rescates de clandestinos elevan ya a casi 3.500 los inmigrantes que han llegado a Canarias por mar en las tres primeras semanas de este mes de agosto desde distintos países del golfo de África.

Esta situación ha provocado que la avalancha de cayucos que el archipiélago sufre este mes tiene desbordados los centros de internamiento y acogida de inmigrantes clandestinos, que atienden ya a más de 4.000 personas.

De este modo, si el dispositivo de control que España y varios países de la Unión Europea (UE) desarrollan ante las costas de Mauritania, Senegal y Cabo Verde no corta las rutas de tráfico de seres humanos, 2006 puede superar todas las estadísticas de llegadas de ‘sin papeles’ a Canarias, territorio que ha recibido en los primeros ocho meses de este año casi 17.500 extranjeros a bordo de distintas embarcaciones.

Goteo constante

La llegada más temprana de ayer se produjo sobre las dos de la madrugada en el puerto tinerfeño de Los Cristianos, cuando los servicios sanitarios atendieron a un cayuco ocupado por 80 inmigrantes, entre ellos tres menores. Dos de los ocupantes tuvieron que ser trasladados al hospital. Ya por la mañana, a las nueve, arribó al puerto de La Restinga (Hierro) una embarcación con 132 personas «bastante cansadas», dos de las cuales tuvieron que ser internadas con hipotermia y quemaduras.

El tercer cayuco del día sorprendió a los bañistas, poco después del mediodía, en la playa de Las Galletas de Tenerife. La barca transportaba a 112 personas, y entre ellas se sospecha que podría haber 12 menores, según informaron a Efe fuentes del Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad 112. Además, uno de los extranjeros tuvo que ser ingresado por padecer una luxación en el hombro.

Por si fuera poco, por la tarde se interceptó un cayuco con unos 120 irregulares que estaba previsto que llegara al puerto de Los Cristianos después de medianoche, y se avistaron dos nuevas barcazas a 68 y 73 millas de Gran Canaria, que al cierre de esta edición estaban también siendo conducidas a tierra.

Al conocer esta nueva avalancha, la portavoz de Interior del PP en el Congreso, Alicia Sánchez – Camacho, afirmó que parece que el Gobierno «o no sabe o no quiere enterarse» del estado «altamente preocupante» de la llegada de inmigrantes a España y le exigió una respuesta «eficaz y rápida» ante una situación «desbordada». Sánchez – Camacho denunció la «gravísima» situación de la inmigración y explicó que sólo la cifra de los más de 900 llegados en las últimas horas demuestra que al Gobierno «le está desbordando» este tema. Estos datos ponen de manifiesto también a su juicio que «no tienen medios para afrontarla y que son incapaces de resolver y controlar las fronteras españolas. Desde luego demuestra desde el Gobierno un absoluto y rotundo fracaso en la lucha contra la entrada de personas en situación de ilegalidad», agregó.

Paralelamente, el secretario general del Sindicato Unificado de Policía (SUP), José Manuel Sánchez Fornet, aseguró que el verdadero problema de la inmigración son los indocumentados que entran por los aeropuertos «como turistas y luego no se marchan», no los que llegan en pateras o en cayucos a Canarias, «que podrían estar viniendo cien años así y la sociedad española los digeriría».

Comparaciones

En este sentido, aunque reconoció que «hacen falta efectivos» extras en Canarias, resaltó que hay que tener en cuenta que puntos como esas islas o La Junquera, representan «el uno por ciento de la inmigración ilegal en España», mientras que «el 50 por ciento entra por el aeropuerto de Barajas y otro 20 por el de El Prat».

Por su parte, la Confederación Española de Policía advirtió de que Canarias «no está soportando ninguna presión migratoria» porque los extranjeros «son trasladados a la Península». Su portavoz, Rodrigo Gavilán, contestó así al presidente Adán Martín, que pidió un gabinete de crisis permanente para seguir la evolución de la situación en Canarias.