España hará una donación extraordinaria de 20 millones de euros a la UNRWA, la agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos, que se sumará a los 3,5 millones aprobados el pasado martes por el Consejo de Ministros. Así lo ha anunciado el titular de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, tras reunirse en Madrid con el comisario general de la agencia, Philippe Lazzarini, quien ha agradecido el paso dado por España y ha mostrado su confianza en que otros países sigan su ejemplo.

La decisión española llega en un momento “muy complicado” para la UNRWA debido a la suspensión del apoyo financiero por parte de 16 países, encabezados por EE UU, tras la denuncia de que una docena de los 30.000 empleados de la agencia estarían implicados en los atentados de Hamás del pasado 7 de octubre. “Las acusaciones me horrorizaron, necesitan seguimiento”, ha subrayado el comisario general. Aunque la ONU despidió de forma fulminante a los denunciados por Israel, Lazzarini ha subrayado que solo cuenta con las informaciones “verbales” que recibió el pasado 18 de enero y que hay abierta una investigación independiente.

El alto cargo de Naciones Unidas ha cifrado en 450 millones de dólares (cerca del 50% de su presupuesto) la cantidad que ha dejado de recibir la agencia, lo que “socava tremendamente” su capacidad para prestar ayuda a casi seis millones de refugiados palestinos en toda la región. “Se está intentando desmantelar la UNRWA, lo que sería un grave error”, ha advertido Lazzarini, quien ha estimado que, gracias a la ayuda española y al desembolso de 50 millones por parte de la UE, dispone de fondos para aguantar hasta abril. “No tengo más horizonte. Vamos mes a mes”, ha dicho.

Albares ha estimado entre cuatro y seis semanas la tramitación del nuevo desembolso de 20 millones, un desembolso que será “no condicionado” –es decir, de libre disposición de la UNRWA— y se hará en un solo pago. El año pasado, España ya triplicó, hasta rozar los 50 millones, su ayuda humanitaria a Palestina.

Lazzarini se ha quejado de que ni siquiera Naciones Unidas haya sido respetada en este conflicto. “Más de 150 centros [de la ONU] que daban albergue a refugiados han sido destruidos. Ha habido 400 muertos y 1.000 heridos por el bombardeo de estos centros. Espero que haya en el futuro una comisión de investigación que pueda aclarar estas atrocidades”, ha declarado.

Ni el ministro español ni el alto cargo de la ONU han querido criticar abiertamente el lanzamiento de ayuda humanitaria en paracaídas sobre la Franja en los últimos días, pero han advertido de que se trata de “una gota de agua en el mar”, en palabras del primero; y que “no es una solución”, según el segundo. Tras recordar que España ha donado a Jordania 110 paracaídas para esta operación, Albares ha reconocido: “Tengo sentimientos encontrados. Todo lo que ayude a paliar es positivo, pero eso no puede desviarnos de lo que necesita la población palestina”. “Seamos francos, la solución es voluntad política. Hoy no contamos con una asistencia humanitaria significativa”, ha añadido Lazzarini, quien ha recordado que antes del 7 de octubre entraban a la Franja por el paso de Kerem Shalom entre 500 y 700 camiones diarios y ahora no llegan a 100.