Una comerciante recibe una ola de cariño al anunciar que cierra su tienda de Bilbao: «Tranquilidad, que me traslado»
Fatou Dieng entristeció a sus miles de seguidores en Instagram al comunicar que bajaba la persiana de Kér Fatou, su tienda de moda africana de Bilbao La Vieja, pero en realidad se cambia a un local más grande en El Casco Viejo, que inaugurará este viernes
Canarias 7, , 29-02-2024Fatou Dieng entristeció este domingo lluvioso a su clientela al anunciar que cerraba la tienda de moda africana que abrió el 26 de julio de 2019 en Bilbao La Vieja. «Ha sido una aventura muy bonita junto a vosotros. Gracias de todo corazón», dedicó a sus casi 6.000 seguidores en Instagram. Pero esta emprendedora senegalesa de 34 años no imaginó que con su adiós iba a recibir una ola de cariño que le ha dado fuerzas para seguir adelante. «Nunca pensé que se lo iban a tomar así. He recibido muchísimos mensajes y llamadas deseándome suerte, de agradecimiento, de apoyo… ¡Hasta me han ofrecido un trabajo! Ha sido un chute de energía que me ayuda a seguir esforzándome y dar lo mejor de mí», cuenta agradecida y abrumada por las muestras de afecto.
Esta joven estusiasta abrió su tienda hace cuatro años y medio en la calle Hernani, en Bilbao La Vieja, corazón multicultural de la villa. Decidió emprender por pura supervivencia. «Estaba embarazada de seis meses y se me acabó el contrato. Me fui a la calle y ¿Qué iba a hacer con dos hijos? Pues abrir mi negocio, algo en lo que pudiese trabajar y también cuidarlos», cuenta. Terminó el bachillerato en Senegal y ya en Bilbao cursó un grado en Comercio Internacional. Su ilusión era acercar al botxo un trocito de su país, llenar el barrio de color y esencia africana. Detrás del escaparate destacaban sus coloridas y alegres prendas. Artículos teñidos de vibrantes rojos, amarillos, azules y verdes, con estampados atrevidos. Muchas de estas prendas estaban confeccionadas con las telas wax, un tejido emblemático de África Occidental.
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Fatou viajaba cada seis meses a Senegal para traer las telas. «En mi primer viaje me llamaron para decirme que España estaba confinada, casi no puedo volver, se me cayó el mundo. Pero empecé a hacer mascarillas con esas telas y me salvaron, pude mantener mi negocio», recuerda. Además de vender los tejidos sueltos, Fatou también ofrecía faldas, ‘bombers’, camisetas o pantalones. «Como mucha gente no se atrevía a vestir así, también vendía complementos y artículos de decoración». Triunfaban sus turbantes y cintas para el pelo, pero también sus famosas camisetas y sudaderas con el mapa de África diseñadas por ella. De hecho, era habitual verla detrás del mostrador dando forma a sus prendas con su máquina de coser.
Fatou puso una nota de color entre tanta sobriedad, consiguió que otras compatriotas se animasen a emprender y llenó de alegría el armario de muchos bilbaínos. Por eso, su fiel clientela recibió con tanta tristeza su despedida cuando la anunció este domingo en Instagram. «Gracias por el arte creado en ese lugar», «Mereces todo lo bueno que te pase» o «Allí donde vayas, te seguiremos», fueron algunos de los cientos de mensajes que le dejaron sus incondicionales. «He creado un lío, no sabía que había dejado huella». Poco después, tuvo que aclarar que no se trataba de un final, sino de una nueva etapa. Y lanzó un excueto «continuará» para alivio de muchos.
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Kér Fatou la casa de Fatou en senegalés se traslada al Casco Viejo, en concreto, al número 23 de la calle Artekale. «Mi amiga Charo, que en octubre abrió justo al lado su tienda de telas, Princess Courts, me dijo que se había quedado un local libre y que me animase», cuenta. En un principio, se lo tomó a broma, pero no tardó en alquilarlo. «Estoy muy ilusionada, porque yo creo que aquí las cosas van a ir mejorando. Han sido cuatro años muy duros, con el covid, una calle poco transitada…». En su nuevo espacio, de 62 metros cuadrados, más grande que el anterior, albergará una zona de tienda y otra en la que impartirá talleres de costura, de telas africanas y para aprender a hacer turbantes. «Yo quiero que las mujeres inmigrantes vean que si realmente luchas y te empeñas, puedes lograr tus sueños, que emprender no es solo para la gente de aquí, sino para todo el mundo». Inaugurará este viernes su nueva tienda y lo hará rodeada de amigos y mucho color. Tranquilidad, queda Fatou para rato.
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