Madrid – Canarias está desbordada. Más de 16.000 inmigrantes han llegado a
las islas desde el comienzo de este año, lo que lo convierte en un
problema «de todo el Estado español». La situación «es crítica», por lo
que el Ejecutivo canario ha lanzado un SOS al Gobierno central y a la UE.
El presidente de Canarias, Adán Martín, exigió ayer que Zapatero
constituya un gabinete de crisis sobre la inmigración que llega a las
islas por mar. Los recursos autonómicos «están desbordados» y su situación
y la necesidad de repartirlos de manera proporcional entre todas las
regiones urge. Así lo aseguraba Martín y la consejera de Empleo y Asuntos
Sociales, Marisa Zamora, en rueda de prensa tras la reunión semanal del
presidente para tratar la evolución de la llegada de cayucos.
   «Río de cayucos». Martín insistió al Gobierno en que constituya de
forma permanente un gabinete de crisis con los responsables de Interior,
Defensa, Asuntos Exteriores y Empleo y Asuntos Sociales para responder a
«una situación cambiante», puesto que el trayecto de Senegal a Canarias es
ya «un río de cayucos».
   En lo que va de año han
llegado a las costas canarias 649 menores, ante lo que el Ejecutivo
insular demandó que se repartan entre otras comunidades autónomas. Tal es
la situación, que los menores tutelados extranjeros son más que los de las
propias islas, según el presidente canario. A esto se suman los costes de
estos tutelajes: 30.000 euros al año por menor, de manera que sólo con los
que hay ahora el gasto directo sería de 18 millones de euros para las
arcas autonómicas. A eso se añade el gasto en hospitalizaciones y
atenciones en centros de salud que producen los inmigrantes llegados por
mar.
   Canarias empezó el año con unos 200 menores inmigrantes, ahora
son 649, y sólo en los días transcurridos de agosto han llegado 85,
mientras que cada día arriban unos cinco más de media, según las cifras
facilitadas por la consejera del Asuntos Sociales, quien calculó que a
finales de año podrían llegar a 900. Zamora subrayó que es preciso un
cambio en la Ley del Menor, puesto que la figura de los menores en
desamparo está pensada para niños maltratados o huérfanos, no para menores
extranjeros que vienen con mentalidad de adultos con el objetivo de
trabajar.
   Los recursos canarios están «colmatados», dijo, ya que los
tres centros provisionales de acogida están abarrotados y la integración
es imposible cuando hay más menores tutelados extranjeros que canarios,
subrayó la consejera. En este sentido, apuntó que no soluciona el problema
que una comunidad autónoma diga que «acoge a cuatro y otra a doce», por lo
que Zamora exigió al Gobierno que asuma su responsabilidad de llevar a
cabo el reagrupamiento de los menores con sus familias, ya que ellos
telefonean a diario a sus casas. Todas esas medidas exigen, también, «una
negociación continua con la Unión Europea», cuya respuesta al problema
hasta ahora – el despliegue de la Agencia de Fronteras Exteriores
(Frontex) – es «escasa y a destiempo», tal y como la calificó ayer el
presidente canario.
   A las quejas del ejecutivo canario respondió
horas después la Comisión Europea por voca de su portavoz de Justicia y
Libertad, Friso Roscam, que «comprende» la situación que atraviesan las
islas, así como las declaraciones de su presidente, pero indicó que está
haciendo todo lo posible para solucionar el problema y que la crisis no
podría resolverse «de la noche a la mañana».
   Por
otra parte, dos inmigrantes murieron en un cayuco en el que viajaban un
total de 81 y que fue hallado ayer por la tarde a siete millas al sur de
Gran Canaria. Otra embarcación arribó por la noche, con 102 ocupantes. En
total, fueron 226 los extranjeros interceptados ayer, informa Europa Press.