Ayer llegaron 344 ‘sin papeles’, dos de ellos muertos, y ya son más de 3.300 en sólo 17 días El presidente del Ejecutivo canario, Adán Martín, lanzó ayer un SOS y exigió al Gobierno central la creación de un gabinete de crisis ante las dimensiones que está alcanzando el problema migratorio.El goteo de cayucos prosigue imparable y ayer mismo llegaron 344 inmigrantes, dos de ellos muertos, a los que hay que sumar los casi 400 del día anterior.

Los dos sin papeles fallecidos arribaron ayer en un cayuco en el que viajaban un total de 81 personas y que fue hallado a siete millas al sur de Gran Canaria. Los supervivientes fueron trasladados al puerto de Arguineguín. Gran Canaria se convirtió en el destino mayoritario de los inmigrantes con 199.

Si en el mes de julio se batieron todos los récords, las cifras de agosto también son espectaculares: en los primeros 17 días han arribado más de 3.300 inmigrantes, lo que supone 10 veces más que los 318 que alcanzaron las Islas Canarias durante el año pasado.

Ante estas cifras, Adán Martín calificó la situación de «alerta roja» y reclamó el reparto de los menores extranjeros a otras comunidades autónomas, según informa Efe. El responsable canario pidió que el gabinete de crisis esté formado por los responsables de Interior, Defensa, Asuntos Exteriores y Empleo y Asuntos Sociales para responder a «una situación cambiante», puesto que el trayecto de Senegal a Canarias es ya «un río de cayucos». «Todos los días nos encontramos con que hemos superado tristemente el récord de llegadas del día anterior», se lamentó el presidente.

Martín y la consejera de Empleo y Asuntos Sociales, Marisa Zamora, ofrecieron una rueda de prensa tras la reunión semanal del presidente con altos cargos del Gobierno para tratar la evolución de la llegada de inmigrantes en cayucos.

El dirigente canario se mostró especialmente preocupado por la situación de los menores no acompañados, ya que, según informó, hay 649 en los centros de la comunidad, que están completamente desbordados: «Llegan cinco menores diarios con un coste de 30.000 euros al año por persona», añadió. Según informó, la acogida de estos niños supone un gasto medio de 18 millones de euros anuales, que debe afrontar la comunidad.

«Canarias empezó el año con unos 200 menores inmigrantes, ahora son 649 y sólo en los días transcurridos de agosto han llegado 85, mientras que cada día arriban unos cinco más de media», destacó Zamora, quien calculó que a finales de año podrían llegar a 900.A su juicio, es preciso un cambio en la Ley del Menor, puesto que la figura de los chicos en desamparo está pensada para niños maltratados o huérfanos, no para menores extranjeros que vienen con mentalidad de adultos con el objetivo de trabajar.

Martín también planteó la necesidad de que España realice propuestas para crear cauces legales para la inmigración y que firme acuerdos con los países africanos sobre cupos de inmigrantes regulares, a cambio de que se termine la salida de los clandestinos.

Todas esas medidas exigen, bajo su parecer, «una negociación continua con la UE», cuya respuesta al problema hasta ahora – el despliegue de la Agencia de Fronteras Exteriores (Frontex) – es «escasa y a destiempo».

Joan Mesquida, director de la Guardia Civil, – que participa en el dispositivo europeo – se defendió ayer de estas críticas, ya que, según avanzó, la puesta en marcha del Frontex dará resultados sólo a largo plazo en la reducción de la llegada de pateras, porque todavía está en una fase muy inicial.

De momento, el buque italiano que colabora en la operación europea ni tan siquiera ha llegado a Canarias y se espera que desde el 25 de agosto pueda patrullar en aguas de Senegal. La entrada en acción de ese barco, que tiene programado arribar el lunes al archipiélago, permitirá ampliar hacia el sur de Africa el radio de la misión de vigilancia contra la inmigración ilegal en las islas, que ahora alcanza sólo hasta las aguas de Mauritania, según informó el responsable de la Guardia Civil.

Mesquida afirmó ayer que el Instituto Armado «no está desbordado» ante la avalancha de cayucos y detalló que la Guardia Civil tiene destinados a 163 agentes y ocho patrulleras para el control de las aguas del archipiélago, además de otros 600 efectivos que ayudan en ocasiones concretas.