SANTA CRUZ DE TENERIFE.- A pesar del despligue de la operación europea de lucha contra la inmigración irregular, puesta en marcha el pasado viernes por la Agencia Europea de Fronteras (Frontex), la llegada de cayucos sigue imparable.

Ayer fueron 379 los inmigrantes irregulares que arribaron a las costas de Tenerife, La Gomera y Gran Canaria, entre los que se encontraban 14 menores. Varios de los subsaharianos precisaron asistencia médica debido a que tenían heridas infectadas e hipotermia. A Tenerife llegaron dos cayucos, con 100 inmigrantes cada uno; a La Gomera, otro con 78 y a Gran Canaria, un cuarto con 100. El presidente canario, Adán Martín, expresó ayer a José Luis Rodríguez Zapatero su preocupación por la constante llegada de inmigrantes, además de su inquietud porque los «medios del Frontex son escasos y han llegado a destiempo». Zapatero, que realizaba una visita a La Palma, expresó su orgullo de ver cómo los canarios tratan a los inmigrantes.