Lisboa
La corbeta lusa “Baptista de Andrade” zarpó hoy desde la Base Naval de Lisboa hacia la costa africana en una misión que forma parte de la operación de la Unión Europea (UE) para la vigilancia de embarcaciones con inmigrantes ilegales.

La misión del navío, que tiene previsto llegar a las aguas territoriales de Cabo Verde el próximo 17 de agosto, durará 45 días, en los que realizará patrullas conjuntas con la antigua colonia lusa para combatir la inmigración ilegal con origen en la costa africana y destino el archipiélago español de las Islas Canarias.

El ministro luso de Defensa, Nuno Severiano Teixeira, dijo que en la participación de Portugal en esta operación comunitaria hay un importante componente de “solidaridad” con España, a cuyas costas llegan a diario cientos de inmigrantes ilegales desde Africa.

El ministro indicó que la defensa de un país ya no sólo se realiza en las propias fronteras geográficas nacionales, sino que es un concepto mucho más amplio, debido a la transformación del “concepto de seguridad” y las “amenazas tradicionales”.

Por su parte, el secretario de Estado Adjunto de Interior, José de Magalhaes, explicó que cuando la corbeta lusa localice una embarcación con inmigrantes ilegales se procederá primero a una tarea humanitaria de auxilio y después se les encaminará al puerto seguro más cercano, con toda probabilidad será el de Cabo Verde.

Magalhaes destacó que esta operación es la primera ocasión en la que se realiza una “acción internacional de cooperación entre Defensa e Interior y con otros países, y además es una acción próxima de la realidad donde se producen los acontecimientos que nos causan perjuicios”.

“Esta nueva forma de organización nos permitirá una acción protección, prevención y tratamiento humanitario”, dijo el secretario de Estado, que quiso resaltar que ésta es una operación especialmente destinada contra el tráfico de personas y “proteger a los ciudadanos que están siendo lanzados hacia Europa”.

La corbeta, construida en los astilleros españoles de Bazán en 1973, tiene 84 metros de eslora y 75 tripulantes a bordo, a los que hay que sumar tres miembros del Servicio de Extranjeros y Fronteras (SEF) luso, que se encargarán de la coordinación con las autoridades de inmigración caboverdianas.

La misión portuguesa, denominada “Hera II” y coordinada por la Agencia Europea de Control de Fronteras Externas (FRONTEX), se suma a los dos aviones, dos helicópteros y cuatro embarcaciones rápidas facilitados por España, Italia y Finlandia.

El pasado 29 de mayo, España y nueve países de la UE acordaron establecer este operativo para patrullar toda la zona del Africa atlántica susceptible de ser punto de origen de pateras y cayucos que viajan hacia Europa y, sobre todo, hacia Canarias.