s probable que la estrategia promocional de Telecinco Cinema de rebautizar la película rodada con el título de ‘Casi familia’ como ‘Ocho apellidos marroquís’ y hacerle un cartel idéntico al de la exitosa ‘Ocho apellidos vascos’ le sirva para atraer algunos espectadores. Los que aún no saben que esta no tiene nada que ver con las dos anteriores, salvo la presencia inicial del coguionista Diego San José, que cayó del proyecto, y el hecho de hacer comedia con prejuicios entre comunidades.

También parece probable que forzar la comparación resulte irritante y vaya en contra de la película. Uno tiene la sensación de que está recibiendo críticas más duras que otras comedias comerciales españolas con menos empaque y gracia, como las de Santiago Segura.

No es que defendamos ‘Ocho apellidos marroquís’, que se mueve dentro de lo previsible, que muestra casi todo en su trailer y a la que le cuesta lo suyo dar el giro imposible de que personajes llenos de banderitas rojigualdas y racistas hasta la médula acaben abrazados a los que unos minutos de metraje antes consideraban «moros de mierda».

Valoración

Datos
Pero dentro de las comedias inocuas para el gran público esta al menos tiene la siempre agradable vis cómica de nuestra Elena Irureta y la habilidad de Julián López para sacar chispas a un tonto. Y sigue mereciéndonos un respeto Álvaro Fernández Armero (desde ‘Todo es mentira’ hasta ‘Vergüenza’) y Daniel Castro, uno de los guionistas de ‘Vota Juan’.

‘Ocho apellidos marroquís’ no da nada que no esperemos, pero es simpática, se deja ver y contiene algunos momentos hilarantes, como el vergonzoso baile del novio, el diálogo «¿vasco?»; «no, del Norte bueno, de Cantabria» o las advertencias de los marroquíes a la chica que va a ir a España. «¡Cuidado, que hay mucho ladrón suelto!». «¡¡Lo peor son las hipotecas!!».