La ONG guipuzcoana Zaporeak vive cada día una situación «especial» en la isla griega de Lesbos. Este miércoles ha informado de que ha vuelto a superar su récord con 2.700 raciones de comida repartidas entre las personas solicitantes de asilo en un día. Ha destacado a través de un comunicado a los medios que «tras la escalada de violencia en el territorio palestino están empezando a llegar refugiados esa zona».

La ONG ha detallado que «de las 144 personas que han llegado entre el pasado lunes y este miércoles a la isla griega, 39 eran de Palestina». Al mismo tiempo ha subrayado que a día de hoy hay un total de 4.418 personas registradas, de las cuales casi el 20% son niños menores de 12 años, y más de 1.000 personas que no tienen ningún documento de registro en su proceso de asilo.

Zaporeak ha señalado que «en las pateras recién llegadas viajaban decenas de familias en situación de vulnerabilidad que no estaban registradas, pero necesitaban una ración de comida», han incidido. Con el fin de poder hacer frente a este trágico panorama en Lesbos ha realizado un llamamiento «a la solidaridad y empatía de la sociedad», porque «los miles de solicitantes de asilo que malviven en los campamentos de refugiados necesitan que sigamos trabajando para intentar mejorar su situación de vida».

La cifra récord de 2.000 comidas diarias que ofrecía esta asociación sin ánimo de lucro el pasado mayo en Lesbos a las personas refugiadas que llegan a Europa se ha quedado pequeña después de las 2.700 raciones que está dando esta semana. Se trata de la demanda más alta en los ocho años de trabajo de la asociación.

El pasado viernes el fundador de la ONG, Peio García Amiano, admitía que las 2.500 raciones servidas hasta esa fecha no era suficiente. «Todos los días cuando nuestros voluntarios vacían la furgoneta de reparto y no queda una ración sigue habiendo una fila con cientos de personas refugiadas a las que no podemos dar de comer», aseguraba.

Para satisfacer la creciente demanda Zaporeak envió la semana pasado un container con casi 30.000 kg de alimentos y edredones.

Peio García Amiano expresó su confianza en que en invierno dejaran de llegar refugiados, porque «vienen dependiendo del tiempo y las mareas», y de seguir así «no vamos a poder dar más de 3.000 raciones». Lamentaba que el campamento Kara Tepe en Lesbos «no da para más».