elson Mandela, es un símbolo conocido en todo el mundo por su lucha contra el racismo, una persona que tras pasar media vida en prisión se convertiría en el primer presidente de raza negra de Sudáfrica y un referente mundial contra el racismo.

Nacido en 1918, desde la década de los cuarenta se comprometió en la lucha contra el apartheid, que podríamos definir como el «desarrollo separado de cada raza en la zona geográfica que le es asignada», y por el que se promulgaron medidas en contra de las personas de raza negra, incluidos los mestizos: no podían acceder a puestos de trabajo cualificados y quedaban excluidos del censo electoral.

En 1962 Nelson Mandela fue detenido y condenado a cinco años de cárcel y, estando en prisión, fue condenado a cadena perpetua. En 1990 el presidente de la República De Klerk comenzó el camino para abolir la segregación racial. Se legalizó el Congreso Nacional Africano y Mandela fue liberado. En 1993, Mandela y De Klerk compartieron el Premio Nobel de la Paz y en 1994 Mandela se convirtió en el primer presidente negro de Sudáfrica.

Falleció en 2013 siendo un símbolo mundial de la lucha contra el racismo. Con ocasión del centenario de su nacimiento en Sudáfrica se organizaron una serie de actos de repercusión mundial, que incluían un partido de fútbol denominado ‘Partido de los campeones’ y que enfrentaba en el estadio en el que en 2010 España se proclamó campeona del Mundo al campeón local Sundowns y al Barcelona.

El eibarrés Iñigo Ruiz de Galarreta llegó muy joven a la estructura de Lezama y pronto destacó por su habilidad en el centro del campo. Debutó con el Athletic en Primera con 19 años y pocos días después sufrió su primera grave lesión de rodilla, siendo cedido la siguiente campaña al Mirandés de Segunda División A, donde tuvo la desgracia de padecer otra grave lesión. Se recuperó y fue cedido al Zaragoza y Leganés, para finalmente en 2016 fichar por el Numancia, donde tras destacar fichó el verano de 2017 por el Barcelona con el objetivo de jugar en el Barcelona B.

Los catalanes militaban en Segunda División A y Galarreta sabía que su función en el equipo era arropar a los jóvenes de la cantera, con 24 años era consciente que resultaba casi imposible llegar al primer equipo. Pero el entrenador Ernesto Valverde citó en mayo de 2018 al eibarrés para jugar un partido especial en Sudáfrica, el homenaje a Nelson Mandela. El Barcelona salió con todas sus figuras: Ter Stegen, Dembelé, Busquets, Piqué, Iniesta… mientras, Galarreta esperó su oportunidad en el banquillo y, cuando en el descanso debutó con el primer equipo azulgrana, era el primer eibarrés en la historia en hacerlo.

El problema es que en el banquillo seguía un tal Messi, que estaba acatarrado, y el público pedía insistentemente su presencia en el campo. Así, a los 76 minutos, el argentino comenzó a jugar sustituyendo al eibarrés Ruiz de Galarreta. Fue su primer y único partido con el Barcelona, ya que su trayectoria continuó en equipos como Las Palmas y Mallorca, en los que tras ofrecer un extraordinario nivel logró fichar este verano de nuevo por el Athletic de Bilbao, donde deja muestras continuas del gran jugador que es.