Ana Avellaneda Presidenta de Cáritas

«Se hace un seguimiento completo de la situación de quienes nos piden ayuda en Miranda»

Los beneficios que se obtengan en la marcha solidaria organizada por EL CORREO serán para el Programa de Infancia, adolescencia y Juventud

El Correo, M. A. C Miranda de Ebro, 28-09-2023

Hay entidades y asociaciones que no precisan de una especial presentación, la gran cantidad de años de implantación, además de la labor que vienen realizando en ese tiempo son avales suficientes. Es ese, sin duda, el caso de Cáritas y su presidenta, Ana Avellaneda, así lo reconoce. «Es evidente que con el mero hecho de hacer referencia a Cáritas la gente sabe perfectamente quienes somos. No conoce todos los programas en los que estamos embarcados ni todo lo que hacemos, pero sí nos identifica, y eso es muy positivo».

Se puede decir por lo tanto que cuando se plantea la posibilidad de organizar algún evento solidario, como es el caso de la marca promovida por ELCORREO, con el patrocinio del Ayuntamiento de Miranda, la Diputación de Burgos y Miranda Empresas, además de la colaboración de Lupa, para este próximo domingo, día 1 de octubre, tiene Cáritas cierta ‘ventaja’ pues nadie duda de que «todo lo que se recaude se empleará en desarrollar un trabajo que beneficiará a un amplio colectivo». En esta ocasión desde Cáritas se ha determinado que lo que se consiga a través de las inscripciones de la marcha se destinará al programa de Infancia, Adolescencia y Juventud.

Es uno de los muchos que se desarrollan en esta ONG, que no se dedica sólo a ofrecer soluciones puntuales a los problemas de las personas que solicitan su ayuda, sino que «se hace un seguimiento completo. Estamos para acompañar a la gente en todo el proceso, desde que vienen por primera vez para pedir la ayuda que necesitan, hasta que consiguen, que ese es el propósito de nuestro apoyo, encontrar una salida a su complicada situación».

Se trabaja con inmigrantes, con personas sin hogar y con familias. A unos se les orienta en el proceso de regularización, a otros se les ofrecen soluciones puntuales a problemas con los que se encuentran por circunstancias, y a todos se les acompaña, término en el que hace hincapié Ana Avellaneda que, pone también el acento en el gran trabajo que realizan en Cáritas todos los voluntarios, «piezas fundamentales para que entidades como la nuestra sigan adelante», y que como pago lo que tienen no es otra cosa que ver cómo algunos de los que llegaron sin nada «vienen al cabo de un tiempo para decirte que han conseguido tener ya todos los papeles en regla, que han encontrado trabajo y se van a establecer definitivamente en Miranda porque está muy agradecidos y muy a gusto. Una situación así la vivimos hace muy pocos días y eso nos hace seguir adelante y trabajar con más ganas si cabe, te animan».

Y para animar también a quienes se acercan hasta Cáritas se cuenta también, además de con el programa de empleo, con talleres por ejemplo de manualidades o costura, que son espacios «en los que se sienten bien, se relacionan entre ellos, socializan y comparten experiencias. Además, en el caso de los migrantes que no hablan castellano, estar en estos talleres les sirven para aprender el idioma».

En Cáritas, como en cualquier otra entidad de carácter social es importantísimo contar con «muchas manos, con voluntarios». Ahora son alrededor de 90 los que regalan su tiempo para que Cáritas siga desarrollando su labor y sus responsables, como Ana Avellaneda, no se cansan de solicitar la incorporación de más personas.

Y es que en muchos casos, los que hay son ya mayores, así que se aboga por la incorporación «no tanto de jóvenes, que también sería interesante, sino de esas personas que se acaban de jubilar y que tienen experiencias que pueden compartir. Creemos que entre ese colectivo podríamos encontrar voluntarios muy valiosos. Seguro que si se acercan por nuestra sede darán con alguna tarea en la que podrían echarnos una mano».

Muchas necesidades

Quienes trabajan como técnico o los que lo hacen como voluntarios en Cáritas son conscientes de que siguen existiendo muchas necesidades, para los más jóvenes «se precisa material informático y escolar, y en eso emplearemos parte de lo que se consiga en la marcha», y para muchas familias, alimentos, que ahora escasean porque «no nos llegan de Europa como ocurría antes. Por fortuna Miranda es muy solidaria y bien los supermercados, que nos abastecen, o los ciudadanos cuando hacemos llamamientos y campañas puntuales, están ahí y colaboran».

Y hablando de colaboración y solidaridad, confía Ana Avellaneda en que el próximo domingo los mirandeses vuelvan a responder y participen en la marcha. Una cita que arrancará del parque Antonio Machado a las 11.30 horas y en la que los participantes recorrerán 7 kilómetros. Las inscripciones, a 3 euros, pueden realizarse en la oficina de Cáritas en la calle Río Ebro 33, en la tienda Moda Re, en Condado de Treviño 34, o en la carpa de ELCORREO el mismo domingo desde las 10.30. «Cuantos más seamos, más necesidades podremos atender», apunta Avellaneda, que anima a los mirandeses a participar.

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