Perfil del usuario

Diario Vasco, 07-08-2006

A pesar de que no exista un perfil claro de los usuarios de este servicio, ya que acuden desde los herederos de las joyas y amas de casa, hasta vendedores ambulantes y feriantes, sí que resulta evidente el impacto que la inmigración ha tenido en este negocio. El pasado año, uno de cada cinco nuevos clientes era extranjero, proporción que llegó a uno de cada tres en las grandes ciudades. Colombianos, ecuatorianos y dominicanos disponen de instituciones similares en sus países de origen, y otros como los marroquíes tienen muy interiorizada la cultura de los metales preciosos.

Por edades, los que más utilizan estos servicios de crédito son las personas de entre los 35 y 50 años, que representan más de un tercio del total, y quienes menos, en contra de la creencia popular, son los mayores de 65 años, que apenas representan un 11%. Por sexo, las mujeres, con dos terceras partes, fueron quienes más empeñaron.

Quienes acudieron a los 25 Montes de Piedad que existen en España para depositar un objeto, que generalmente fue una joya, recibieron por él un 72% del valor de la tasación y dispusieron de un plazo medio de doce meses para devolver el crédito. En los últimos ejercicios tanto el periodo como el porcentaje prestado han ido en aumento, mientras que los tipos de interés se han ido reduciendo.

Al contrario de lo que a primera vista pueda parecer, los Montes de Piedad siguen siendo negocios rentables. De hecho, el pasado año se atrajeron 21.064 nuevos clientes en España. «La actividad en los Montes no decae y algunos como los de Madrid, Barcelona, Valencia o Sevilla gozan de buena salud», afirma Francisco Aguilera, vicepresidente de la Comisión Nacional de los Montes de Piedad.

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