Las ovejas negras de la educación madrileña están empezando a dejar de serlo. Al menos, así se desprende del análisis de las notas obtenidas en la prueba de sexto de Primaria que se celebró la pasada primavera. Los 66 centros públicos que la Comunidad de Madrid ha señalado como prioritarios porque coinciden en ellos varios factores negativos para la calidad de la enseñanza mejoraron su nota en un 34% de media después de un año de puesta en marcha del Plan Regional de Centros Públicos Prioritarios, una iniciativa pionera que trata de invertir más allí donde es más necesario, en los colegios e institutos con más problemas.

La Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid tiene firmados convenios con 66 centros públicos. Son los colegios e institutos que tienen altos porcentajes de inmigrantes, alumnos gitanos o niños de pocos recursos económicos. Otros de los indicadores que se manejan para seleccionar los colegios son los problemas de convivencia de los alumnos, que haya un alto porcentaje de jóvenes que no se gradúan en la ESO o que los colegios sean de los menos demandados de su zona.

En el pasado curso, la Consejería destinó 3,5 millones de euros a estos centros, siempre con un programa concreto para cada uno de ellos. Así, se pueden producir refuerzos en el personal de apoyo (orientadores y trabajadores sociales), es posible aprobar programas especiales de actividades extraescolares o se puede ampliar el horario de la biblioteca, entre otras medidas.

El titular de Educación, Luis Peral, valoró positivamente estos resultados y anunció que el año que viene se incorporarán al programa 22 nuevos centros (20 institutos y dos colegios), lo que prueba la aceptación del programa en los consejos escolares.

En total, el próximo curso habrá en la Comunidad de Madrid 88 centros prioritarios. La Consejería no quiere desvelar de qué centros concretos se trata para no estigmatizarlos. Al contrario, quiere que suban su nota media y acabar con el fracaso escolar que es más habitual en ellos que en otros colegios e institutos.

Luis Peral explicó que «se trata de una iniciativa de equidad, dar más al que más necesita los recursos». La iniciativa se ha incorporado al programa nacional del PP en materia de Educación y el propio consejero madrileño ha estado ya dos veces en Francia estudiando los resultados positivos de una iniciativa similar.

La mayoría de los centros está en Madrid capital pero se reparten por todos los distritos. Destacan especialmente Puente de Vallecas, donde hay 10, Usera, con siete o Villaverde, con cuatro.

La Consejería anunció que el programa espera mejorar el rendimiento de más de 30.000 alumnos que estudian en entornos sociales difíciles o desfavorecidos.

Los convenios del Plan de Centros Prioritarios tienen una vigencia de cuatro años renovables. Y es al cabo de este tiempo cuando Educación podrá contar con una mejor evaluación de sus resultados.

Uniforme escolar

Peral destacó que entre las medidas adoptadas por 11 de los centros está la implantación del uniforme escolar, un «sistema que promueve y garantiza la igualdad de todos los alumnos», dijo. Así lo decidieron los consejos escolares de cada uno de los centros.

El programa también afecta al Plan de Infraestructuras Educativas, de forma que estos centros tengan prioridad a la hora de la mejora de los mismos – pintura, arreglos pendientes – o la renovación de todos los materiales, desde los pupitres a las instalaciones comunes de todo el colegio.

En algunos de los colegios e institutos se puede optar por cambiar su organización pedagógica agrupando a los jóvenes, por ejemplo, por niveles de competencia y no tanto por edades o ciclos, siempre de forma coordinada con el director y el consejo escolar. Además, se impulsa la utilización de las nuevas tecnologías para que los alumnos refuercen su aprendizaje en las mejores condiciones posibles.

La Comunidad de Madrid está también tratando de acabar con una de las lacras más importantes de la educación, las aulas prefabricadas, también llamadas barracones.

Como explicó Peral, ahora mismo quedan 48 de estas aulas y en mayo espera que este número esté ya por debajo de 20.

La situación de partida era bastante mala. En 2003 había 134 barracones donde los niños tenían que dar sus clases por falta de colegios o por insuficiencia de las instalaciones existentes.En 2004, se pasó a 164, pero el gran salto se empezó a dar con el actual Plan de Infraestructuras Educativas, que pretende invertir 200 millones de euros en toda la legislatura. En 2005, las aulas prefabricadas eran 81 y en mayo de este año, 53. En algún caso, como en Batres, no existe suelo disponible para construir un colegio, con lo que las ocho aulas que existen en este municipio no podrán desaparecer hasta que se solucione este problema.

Abren 10 nuevos centros

El próximo curso comenzarán a funcionar 10 nuevos colegios de Educación Infantil y Primaria. Seis son de nueva construcción y cuatro se desdoblarán de su centro actual, pasando a ser independientes.

Los nuevos centros supondrán ampliar la oferta educativa en 52 nuevas unidades que ofertarán 1.150 nuevas plazas escolares y tendrán 58 profesores. Con estas actuaciones, la Comunidad contará con 757 colegios de Infantil y Primaria y 25 de Educación Especial.

Los nuevos centros estarán en Aranjuez, Arroyomolinos, Fuenlabrada, Parla, Pedrezuela y Valdemoro y entrarán en funcionamiento en septiembre. Todos ellos supondrán una oferta de 3.600 nuevas plazas, 1.200 de Educación Infantil y 2.400 de Primaria.

Los cuatro colegios restantes se han creado por desdoblamiento de los actuales y estarán en Talamanca del Jarama, Ribatejada, Villanueva de Perales y Loeches.

La inversión realizada forma parte del Plan Cuatrienal de construcciones escolares, que cuenta con una inversión global de 800 millones de euros para el periodo 2005 – 2008, lo que permite desarrollar el Acuerdo para la Mejora de la Calidad del Sistema Educativo que contempla la construcción de 160 centros.