PAMPLONA. Algo más de un año después de concluido el proceso extraordinario de regularización de inmigrantes, las estadísticas de la Encuesta de Población Activa (EPA) muestran un alto nivel de paro entre la población extranjera de Navarra. En concreto, uno de cada cuatro parados en la Comunidad Foral es inmigrante, una realidad que empieza a inquietar al Ejecutivo foral.

Aí, según explicó en un comunicado la pasada semana, el Gobierno de Navarra “sigue estudiando con detenimiento el incremento del paro que se viene registrando durante los últimos meses entre la población inmigrante”, fenómeno que considera “preocupante”.

población extranjera, 48.100 Las estadísticas del segundo trimestre de 2006 apuntan a que en Navarra viven 48.100 extranjeros (los que tienen la doble nacionalidad se cuentan como españoles), 22.100 hombres y 25.900 mujeres. De ellos, el mercado laboral considera como población activa a 33.100, repartidos prácticamente a partes iguales entre los dos sexos. Finalmente, 29.400 están ocupados y 3.700 carecen de empleo, lo que supone una tasa de paro del 11,01% frente al 4,87% de los españoles.

Además, el colectivo de parados de nacionalidad extranjera significa el 22,42% del total de desempleados que viven en Navarra, situación que ha mejorado respecto al primer trimestre del año, en el que representaba el 27,80% con 5.200 personas sin actividad laboral.

En este sentido, cabe preguntarse acerca de las razones de este alto índice de paro en un colectivo que, precisamente, ha sido regularizado en función de un contrato de trabajo que acredita su actividad laboral. Así, las regularizaciones propiciaron un descenso de la tasa de desempleo desde el 12,50% del primer trimestre de 2005 al 4,76% en el segundo, ya en situación técnica de pleno empleo. Sin embargo, en el primer trimestre de este año se ha incrementado hasta el 15,39% y entre las explicaciones no hay que desdeñar la existencia de un posible fraude.

En cualquier caso, cabe destacar como fenómeno significativo la mayor empleabilidad de las extranjeras frente a las españolas, una tendencia que ha ido cobrando forma en el último año y medio hasta el punto de que el paro afecta al 13,29% de los hombres inmigrantes, pero sólo al 8,74% de las mujeres. Sin duda, un altísimo porcentaje de las trabajadoras inmigrantes desempeñan su actividad en el sector servicios, en trabajos como limpieza, distribución, hostelería o atención de enfermos y mayores.

Además, es importante destacar que en marzo de 2005 el paro afectaba al 19,54% de las mujeres inmigrantes, cifra que ha descendido hasta el reseñado 8,74%. Por contra, los hombres tienen más problemas y, de hecho, en el primer trimestre el índice de paro masculino alcanzó el 17,04%.

No obstante, la tasa de actividad masculina entre los inmigrantes es actualmente del 83,69% frente al 71,78% de las mujeres. Entre los españoles, los hombres alcanzan el 68,87% y las mujeres caen al 48,37%. La media en Navarra se ha situado en el 60,24%.