Un trabajador ecuatoriano se convierte en la décima víctima de un golpe de calor
El inmigrante, que vive en Los Alcázares, se sintió mal tras pasar toda la mañana trabajando al sol y fue trasladado a la UCI del Rosell
La Verdad, 05-08-2006Un trabajador ecuatoriano de 40 años es ya la décima víctima por golpe de calor en lo que va de verano. Segundo Manuel E., que trabaja en una empresa de jardinería en Los Alcázares, se encontró mal el jueves por la tarde, después de haber estado trabajando al sol por la mañana. Fueron sus compañeros de piso, en la calle Molino 45, los que lo encontraron inconsciente, en su casa, sobre las siete de la tarde. Avisaron al 061, y la Unidad Medica de Emergencias (UME) de Torre Pacheco lo trasladó urgentemente al hospital del Rosell, en Cartagena. Continúa ingresado en la UCI, donde evoluciona favorablemente.
Mientras, el hombre de entre 38 y 40 años que fue recogido el jueves en estado de inconsciencia en la carretera de El Palmar continúa ingresado en La Arrixaca en estado muy grave. La Policía todavía no ha conseguido identificar a esta persona, que permanece en coma. Ningún familiar se ha interesado todavía por él. Lo único que se sabe es que debía estar trabajando en alguna obra cercana, porque estaba vestido con un mono azul.
Por otra parte, Sanidad informó ayer de un nuevo golpe de calor, que se produjo el 15 de julio y afectó a un agricultor de 42 años. Fue ingresado en la clínica Ibermutuamur y dado de alta hace unos días.
Las temperaturas extremas que se están alcanzando – las más altas desde 1994 – se están notando en la salud de los murcianos. Con el ecuatoriano ingresado en el Rosell ya son diez los afectados por golpe de calor. De ellos, tres son inmigrantes que realizaban trabajos al sol. Dos de ellos, un marroquí de 40 años y un colombiano de 37, son jornaleros a los que las altas temperaturas sorprendieron en Mazarrón y Jumilla, respectivamente. En el tercero de los casos, el del ecuatoriano ingresado en el Rosell, se trata de un empleado de una empresa de jardinería.
Por el momento, solamente ha habido que lamentar un fallecimiento, el de un hombre de 53 años en Espinardo, que sufrió una hipertermia después de haber estado trabajando en la obra de un hermano.
Sorprendentemente, sólo tres de los diez golpes de calor registrados hasta el momento han afectado a mayores de 80 años. El resto son personas de mediana edad o incluso treinteañeros, que o bien se encontraban trabajando en las horas centrales del día o se expusieron al sol de forma imprudente. Es el caso de un vecino de Santomera que ingresó en el Reina Sofía tras quedarse dormido en la playa.
Los servicios sanitarios han atendido a un total de 56 personas afectadas en mayor o menor grado por el calor. Junto a las diez hipertermias que han requerido ingreso hospitalario, otras 15 personas han sido atendidas en urgencias, y 31 han acudido a los centros de salud.
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