Portugalete hace gala de su solidaridad con la conmemoración del Día Mundial del Refugiado, que tiene lugar cada 20 de junio. Una ocasión para homenajear y enaltecer la fuerza de aquellas personas que se ven obligadas a huir de sus hogares para escapar de conflictos o persecuciones. Desde 2017, cuando estalló la crisis siria, se generó una ola de solidaridad en la villa jarrillera que continuó con el paso de los años dando asilo a exiliados de Afganistán, Colombia, Venezuela y Ucrania, entre otros países. En total, con la colaboración de Movimiento por la paz, se han acogido a 376 personas, a quienes se les ha ofrecido un acompañamiento para trámites como empadronamiento, médico, etc., con el fin de ayudar a su integración.

Una de las necesidades que se detectaron en el curso 2021-2022 fue la limitación en el idioma por parte de los jóvenes migrantes que llegan ya comenzadas las clases y los centros educativos no tienen ni capacidad de respuesta ni método que facilite su adaptación al entorno. Por ello, surgió el proyecto ‘Parejas lingüísticas’, al que se suma la Fundación Manuel Calvo. Se trata de una iniciativa dirigida a facilitar el conocimiento y la práctica de los idiomas locales a solicitantes o beneficiarios de ayuda internacional para favorecer su integración y participación social.

De esa manera, mediante los cincuenta voluntarios que han tomado parte en el proyecto desde su puesta en marcha, se ha ayudado directamente a otro medio centenar de personas. ¿Cómo? Poniendo en contacto a los voluntarios y los refugiados para que se les enseñe y guíe. Así, los acogidos logran un contacto más estrecho con la lengua y el entorno, mientras que los autóctonos obtienen una experiencia de conocimiento de la realidad multicultural de la villa.