Ryyan Alshebl, de refugiado sirio a alcalde alemán

Llegó a Alemania en el 2015 como solicitante de asilo escapando de la guerra en Siria y ahora gobernará la pequeña localidad de Ostelsheim, tras recibir el 55,41% de los votos en las elecciones municipales

La Vanguardia, MARÍA-PAZ LÓPEZ, 01-06-2023

Entre el millón de solicitantes de asilo procedentes de Siria, Irak o Afganistán que llegaron a Alemania en el 2015 venía el joven sirio Ryyan Alshebl. Tenía 21 años y escapó de su país para eludir el servicio militar y la guerra. Ocho años después, Alshebl ha sido elegido alcalde de Ostelsheim, localidad de 3.210 habitantes, en unas recientes elecciones municipales en el land de Baden-Württemberg. Concurrió como independiente pese a estar afiliado a Los Verdes, cosechó el 55,41% de los votos derrotando a otros dos aspirantes autóctonos, también independientes, y tomará posesión del cargo el próximo 19 de junio.

Su historia de exrefugiado que logra alcanzar un puesto público –la prensa alemana asegura que es el primer alcalde alemán de origen sirio– llama la atención, y él mismo, a sus 29 años, lo ve así. “Ostelsheim ha hecho un signo de apertura al mundo. Mi resultado, tras una campaña electoral completamente normal contra candidatos de la zona, demuestra que es posible para alguien llegado de fuera entrar en estructuras que parecen cerradas; los votantes no tuvieron en cuenta mi origen, sino mi cualificación”, argumentó en un encuentro con corresponsales extranjeros esta semana en Berlín, en la Fundación Heinrich Böll, vinculada a los ecologistas. “De todos modos, no basta con aprender y dominar el idioma y prepararse estudiando y esforzándose; también hay que estar en el lugar indicado en el momento indicado, y eso es lo que me ha pasado a mí”, admite Ryyan Alshebl, que se expresa en un alemán excelente.

“Los votantes de Ostelsheim no tuvieron en cuenta mi origen, sino mi cualificación”, dice Alshebl en un alemán excelente
En noviembre del 2015, el joven Ryyan emprendió el viaje clandestino de Siria a Alemania, donde vivía ya uno de sus dos hermanos, llegado en el 2013 con visado de estudiante. Atrás quedaron sus padres –ella, profesora de instituto; él, ingeniero agrónomo– y el otro hermano. Esa parte de su familia sigue viviendo en su ciudad, Sweida, en el suroeste del país.

“Yo me fui con cuatro amigos desde Líbano a Turquía y de allí en una barcaza hasta la isla de Lesbos; íbamos a bordo 49 personas, hacía frío, era poco después de la medianoche y estaba muy oscuro –rememora Alshebl–. Desde Grecia pasé a través de la ruta de los Balcanes hacia el centro de Europa; a veces en autobús y a veces a pie, íbamos andando sobre todo en los momentos en que había que cruzar fronteras. Nos llevó doce días alcanzar Alemania”.

Él recaló en Baden-Württemberg, donde aprendió alemán y cursó formación profesional dual en administración, becado por el land. “En Siria había hecho la Selectividad y estudiaba Finanzas y Banca en la Universidad, pero aquí no me fue posible convalidar la Selectividad”. En el 2017 se afilió al partido Alianza 90/Los Verdes, porque “la protección del clima es muy importante”. En el 2022 obtuvo la nacionalidad alemana, indispensable para acceder a un cargo público, si bien mantiene la siria, a la que es legalmente inviable renunciar. “No soy una excepción; cualquier sirio con estatus de refugiado y más de seis años de residencia en Alemania puede solicitar la ciudadanía alemana”, aclara para atajar equívocos.

Ryyan Alshebl, de 29 años, alcalde electo de Ostelsheim, localidad de 3.210 habitantes en el land de Baden-Württemberg (Alemania).Tomará posesión del cargo el 19 de junio de este 2023. Alshebl llegó a Alemania como solicitante de asilo sirio en el 2015; ahora tiene también la nacionalidad alemana. Foto tomada en Berlín el 30 de mayo del 2023
Ryyan Alshebl, de 29 años, alcalde electo de Ostelsheim, en la Fundación Heinrich Böll, en Berlín, el 30 de mayo del 2023 MARÍA-PAZ LÓPEZ
Alshebl ha residido hasta ahora en Althengstett, otra ciudad de la región, pero se muda en breve a la localidad que le ha elegido alcalde, Ostelsheim. ¿Por qué le han votado tantos vecinos? “Creo que llevé un buen programa electoral, centrado en abrir guarderías a jornada completa, potenciar los negocios locales y avanzar en digitalización de la administración. Hice las prácticas en un centro de familia de Althengstett y eso me permitió comprender las necesidades generales de los municipios de la zona”, explica. Aunque durante la campaña recibió algunos mensajes de odio, asegura no haber tenido problemas graves con la ultraderecha.

¿Cree que su experiencia como refugiado le servirá en su nuevo trabajo? “En el camino aprendí a asumir responsabilidades, por mí mismo, por otras personas y por el entorno. Cuando te marchas de tu país porque hay guerra, se madura antes, aunque no guste tener que madurar por ese motivo”.

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Ryyan Alshebl, que está soltero, pertenece a la minoría religiosa drusa, de la que forma parte el 3% de la población siria. Los drusos, que profesan una fe monoteísta y mística, con elementos judíos, cristianos y musulmanes, son entre 800.000 y un millón de personas, asentadas mayoritariamente en el Levante mediterráneo. “En campaña, algunos me preguntaban si soy practicante; soy druso, pero no soy una persona religiosa, y creo que para quien preguntaba, esta neutralidad era positiva”.

El nuevo alcalde de Ostelsheim tiene ahora nueva patria, pero no olvida su patria natal. “Sobre Siria tengo sentimientos encontrados; es el país donde nací y crecí, donde pasé mi infancia y juventud, donde están mis amigos y mi familia extendida, y echo de menos eso. Pero me alegro mucho de tener la oportunidad de vivir en Alemania, otros no la han tenido”.

Lo importante ahora, sostiene, es que ha descubierto que siente pasión por la política, por lo que es probable que la carrera iniciada en esta pequeña alcaldía vaya algún día a más.

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