Condeno, por despreciable, la paliza en Villabona a una pareja de inmigrantes homosexuales. Dos delitos en un solo acto, homofobia y xenofobia, con los agravantes de alevosía y superioridad numérica. O interiorizamos la hoja de ruta para aminorar esta plaga o los negros nubarrones que se ciernen sobre nuestra sociedad, serán la constatación de lo que nos espera a futuro.