Dos de cada tres catalanes están de acuerdo en que sus ayuntamientos dediquen una parte de los recursos a la cooperación al desarrollo, también en un contexto de crisis económica como el actual. Así lo recoge la última encuesta del Fons Català de Cooperació al Desenvolupament, presentada este jueves, que también señala que más de la mitad de la población encuestada considera que hay que aumentar los recursos a la cooperación hasta llegar al 0,7% en 2030, el objetivo fijado por el Gobierno.

El informe también muestra que el 68% de la ciudadanía está de acuerdo en abrir vías legales y seguras a la población refugiada de otros países, mientras que el 72% ve con buenos ojos que su consistorio acoja a población refugiada.

También en relación con la población refugiada, los resultados señalan que más de la mitad de los encuestados (55%) considera que el Gobierno debería acoger a las personas refugiadas forzadas a migrar.

De las conclusiones de la encuesta se desprende también que los catalanes ven la guerra en Ucrania y otros conflictos armados como los principales problemas mundiales, seguido de la crisis económica y energética, y la pobreza y desigualdades.

Así, la población de Catalunya también considera que el sistema económico internacional es la principal causa de la pobreza, y además creen que les afecta directamente por la llegada de personas forzadas a migrar.

En cuanto al impacto de la pobreza y la vulneración de derechos humanos, un 55% de las personas encuestadas considera que esta afectación es desigual entre hombres y mujeres, mientras que un 39% considera que la pobreza y la vulneración de derechos humanos afecta a todos por igual, independientemente de su género.