La trata de mujeres es un delito que también afecta a Gipuzkoa. En los últimos años más de un centenar de personas obligadas a prostituirse han sido liberadas en el territorio. Uno de los grupos criminales dedicados a este delito contra los derechos humanos se enfrenta ahora a una petición de 510 años de cárcel por parte de la Fiscalía. Se trata de cinco personas de nacionalidad venezolana (tres hombres y dos mujeres) que captaban a chicas en su país de origen bajo falsas ofertas de trabajo y les obligaban después a prostituirse en condiciones inhumanas en pisos de Donostia, y de dos hombres de nacionalidad española, un piloto de avión y el responsable de un hotel rural, que colaboraban conscientemente para que las mujeres entraran en España de manera ilegal. Se les acusa de la explotación de siete de ellas.

Según recoge el escrito de acusación de la Fiscalía, los cinco acusados principales, a quienes acusa de trata de seres humanos, de atentar contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y de tráfico ilegal de inmigrantes, se dedicaron entre 2017 y 2019 a introducir a mujeres en España de forma ilegal para explotarlas sexualmente. Además, las utilizaban para el tráfico de drogas, que distribuían entre los clientes.

Operaban de la siguiente forma. Contactaban con las víctimas en Venezuela, mujeres en situación económica vulnerable, ofreciéndoles una vida mejor. Cabe destacar el contexto de conflicto político-económico en el que estaba inmerso el país, que también empujaba a estas mujeres a buscar una salida laboral en España.

Los delincuentes les ofrecían trabajo como cuidadoras, limpiadoras, recepcionistas y, en algunos casos, sí les planteaban ejercer la prostitución, aunque en condiciones «de autonomía e independencia».