Crónica del incendio que mató a 40 migrantes en Ciudad Juárez: “Si nos hubieran llamado a tiempo, habríamos salvado a más personas”

Un bombero mexicano relata con detalle la situación que se encontró en el centro en llamas, mientras decenas de migrantes intentaban salvarse; las autoridades han presentado cargos contra el director del Instituto Nacional de Migración por las condiciones del lugar

El Diario, Justo Robles, 19-04-2023

Después de sacar a más de una decena de personas del edificio, vi a un hombre sentado encima de un retrete, en posición fetal. No podía verle la cara, pero me apresuré a entrar”, cuenta Isidro. “Lo agarré por los brazos y un compañero lo agarró por las piernas y, mientras lo sacábamos del edificio, el hombre abrió los ojos. No me dio las gracias, pero tuve la sensación de que el hombre sabía que lo había salvado y que iba a sobrevivir”, explica.

Investigación
La fiscal federal mexicana Sara Irene Herrerías ha indicado que ha abierto una investigación para esclarecer las 40 muertes, que se consideran presuntos homicidios, y ha acusado a los responsables de no hacer nada para evacuar a las víctimas.

Dos días después del incendio, un abogado de Ciudad Juárez, Javier Vásquez Campbell, presentó una denuncia en el estado de Chihuahua en nombre de algunas de las víctimas contra Salvador González Guerrero, alto funcionario del INM.

“González Guerrero dio la orden a través de una llamada telefónica de que los migrantes ‘alojados’ en el lugar donde se inició el incendio no fueran liberados bajo ninguna circunstancia”, sostiene la denuncia, a la que ha tenido acceso The Guardian.

A The Guardian no le ha sido posible contactar con González Guerrero para que pudiera dar su versión de los hechos. Según ha informado el periódico local El Diario, pesa una orden de arresto en su contra y los agentes federales lo buscan. Desde finales de la semana pasada se le considera un fugitivo.

Vásquez Campbell ha explicado que dos guardias del centro de detención y un funcionario de inmigración contactaron con él poco después del incendio en busca de asesoramiento jurídico ante la preocupación de que pudieran estar en el punto de mira de la fiscalía federal.

“Ni salida de emergencia, ni extintores”
Las organizaciones de defensa de los derechos humanos llevan mucho tiempo denunciando las malas condiciones y el hacinamiento en los centros de detención de migrantes de México. Algunas instantáneas de poca calidad del interior del centro de detención de Ciudad Juárez, tomadas unas semanas antes del incendio y que fueron enviadas a The Guardian, muestran a migrantes durmiendo en decenas de literas ocupadas y a otros en colchones por el suelo.

Según un comunicado de prensa del INM, el 27 de marzo había 68 migrantes de países de Centroamérica y América del Sur detenidos en el centro. Un día después, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, afirmó que el incendio se originó cuando los migrantes prendieron fuego a los colchones para protestar contra la inminencia de sus deportaciones.

Isidro recuerda haber visto los colchones en llamas mientras buscaba frenéticamente a supervivientes en el interior del centro. “Durante nuestra última inspección de las estancias del centro, nos asegurábamos de que nadie se quedara atrás, cuando me di cuenta de que no había rutas de salida de emergencia, ni extintores”, explica Isidro.

Posibles incumplimientos
Las condiciones en el interior del centro de detención, tal y como él las observó, parecen vulnerar una normativa federal que entró en vigor en 2011 que establece directrices para empleadores y trabajadores en caso de incendio. Las normas exigen que los lugares de trabajo, incluidos los que están bajo jurisdicción federal, como los centros de detención de migrantes, tengan a la vista avisos sobre los riesgos de incendio, las rutas de evacuación, las salidas o escaleras de emergencia e indicaciones sobre dónde encontrar un extintor.

El 27 de marzo, Roberto Briones, director de Protección Civil de Ciudad Juárez que supervisa el cuerpo de bomberos, declinó responder a las preguntas sobre las condiciones en el interior del centro de detención. Sin embargo, anteriormente había declarado a los medios de comunicación locales que no había recibido ningún informe sobre el inicio de un incendio en las instalaciones de migración.

Briones aseguró que fue un capitán del cuerpo de bomberos quien vio salir humo del centro de inmigración y llamó al equipo de bomberos. Coincide con el relato de Isidro y con un mensaje de audio de un miembro del cuerpo de bomberos enviado a The Guardian. Según Isidro, cualquier persona atrapada en un incendio tiene tan solo tres minutos para salvarse.

Tres semanas después del mortífero incendio, López Obrador afirmó que la puerta del centro de detención permaneció cerrada mientras los migrantes se encontraban atrapados en su interior “porque la persona que tenía las llaves no estaba allí”.

Isidro cree que la tragedia podría haberse evitado con condiciones de seguridad mejores y una mayor capacidad de reacción. “Si nos hubieran llamado a tiempo, habríamos salvado a más gente”, lamenta.

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