Las inquietudes de los lectores

La Voz de Galicia, 30-07-2006

Ellos son los protagonistas de esta sección, a la que dirigen sus opiniones, críticas, reclamaciones y sugerencias sobre el periódico. Es función de esta Amiga defender y preservar los derechos de la audiencia y representar a ésta ante la Redacción y la Dirección de La Voz.


Uno de los asuntos sobre el que los lectores han reparado más este último año está relacionado con el desequilibrio que se da en ocasiones entre los títulos y los textos informativos. Titulares que han provocado confusión porque no se ajustaban a lo que decía el texto informativo.


Veracidad y exactitud


El imán de una noticia reside en su titular, que es el que debe atraer el interés del lector e incitarlo a la lectura de la información. Hacer un buen titular es tarea complicada, porque lo que se quiere decir debe encajar en un espacio determinado y, además, no deben repetirse términos en cabezas de la misma página.


«En una cabeza no puede aparecer lo que no está en el texto». Este aserto que parece una obviedad figura en el Libro de estilo de La Voz precisamente porque es una regla de oro del trabajo periodístico. Veracidad y exactitud son las coordenadas que debe manejar un profesional cuando trabaja las noticias y confecciona los titulares. Sabido es que muchos lectores sólo se quedan en el titular de las noticias, por lo que, si éste no responde con veracidad y exactitud a la información que acompaña, el lector se quedará con una idea equivocada del hecho noticioso.


El afán por los titulares llamativos, con gancho para atrapar la atención, conduce a veces a forzar las cabeceras, que quedan unidas con hilvanes a los textos. El «no dejes que una historia te estropee un buen titular» es recurso de periodistas con pocos escrúpulos. Toda noticia que merezca ser transmitida debe perseguir un título adecuado.


Los lectores han detectado también desconcertantes diferencias entre los titulares de la portada y los de páginas interiores, lo que trasluce una aparente falta de coordinación. Desde esta columna se ha prometido enmendar los errores y extremar los mecanismos de control.


Las fotografías


Algunas fotografías publicadas en el periódico, en unos casos por su crudeza y en otros por rozar el morbo o el mal gusto, han inspirado las cartas de algunos lectores. El de las imágenes es tema polémico, que también suele ser objeto de debate en el seno de las redacciones. No todos los periodistas coincidimos en lo que debe o no debe ser publicado, ni tampoco en el criterio sobre qué puede ser tachado de mal gusto o dónde está la frontera del morbo. No hay baremo que mida estas cosas y cada profesional actúa según su criterio. Incluso una misma foto puede ser calificada de distinta manera según sea publicada en color o en blanco y negro.


Por el contrario, concita bastante unanimidad la teoría de preservar la identidad de los menores o de las víctimas que puedan ser identificadas.


África, en el olvido


En más de una ocasión, algunos lectores nos han apercibido por la escasa atención que prestamos a África. En febrero pasado, unas lluvias torrenciales provocaron inundaciones en los campos de refugiados del Sáhara Occidental – 50.000 personas se quedaron sin sus casas – , lo que vino a agravar la dramática situación en la que sobreviven. «El apoyo de los medios es imprescindible para que la ayuda internacional llegue al Sáhara. Investiguen qué está pasando allí», nos rogaba una lectora. Su demanda informativa se unía al interés de muchas familias gallegas vinculadas al pueblo saharaui a través del Programa Vacaciones en Paz, que consiste en la acogida de niños saharauis durante los meses de verano.


Para que África no sea un continente olvidado, la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, viajó a varios países subsaharianos con los que España ha suscrito proyectos contra la pobreza, la enfermedad y la marginalidad. La información que La Voz dio sobre este viaje hizo hincapié en su aspecto más trivial – la indumentaria de la vicepresidenta – , sin hacer apenas mención de los contenidos de esta visita a una de las zonas más subdesarrolladas del mundo. Fueron varios los lectores que nos reprocharon la frivolidad con que tratamos el tema.


Circo mediático


Tampoco pasó desapercibido el circo mediático montado en torno a algunos personajes de la vida social (el reproche no era para La Voz en particular sino para los medios en general). Recibimos mensajes donde se criticaba el espectáculo que se había hecho con la enfermedad, agonía y muerte de Rocío Jurado.


El derecho a la intimidad de las personas, incluidas las que tienen relevancia pública, debe ser preservado, a no ser que el propio protagonista dé instrucciones en sentido contrario (como fue el caso de Juan Pablo II, que expuso en público su agónico final e incluso se mostró su cadáver).


Durante este año, también han ido en aumento las quejas por el sexismo en el uso del lenguaje y por la forma en que a veces se tratan las informaciones sobre la violencia contra la mujer. Igualmente nos han llamado la atención por el uso de estereotipos relacionados con la inmigración. Desde los medios, muchas veces de forma inconsciente, alimentamos prejuicios, por lo que deberíamos redoblar la guardia para no perpetuar clichés que la mera reflexión nos llevaría a rechazar, además de desterrar las connotaciones discriminatorias, racistas y xenófobas.

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