El centro Gainberri de Tolosa y la asociación Jatorkin para la integración del inmigrante magrebí en Tolosaldea han colaborado este curso escolar para fomentar la inclusión social de jóvenes inmigrantes en situación administrativa irregular. Jatorkin, con sede social en Tolosa, tiene como objetivo defender los derechos humanos de los inmigrantes, y por ello organiza actividades que fomentan la solidaridad y el respeto mutuo entre los inmigrantes y la población autóctona.

El alumnado del centro, que cuenta con una asignatura de inclusión en segundo curso del grado superior Enseñanza y Animación Sociodeportiva (EAS), ha colaborado con Jatorkin para fomentar la relación entre sus alumnos y jóvenes inmigrantes, a través de varias intervenciones. Cuentan desde Gainberri que el objetivo pedagógico de este proyecto piloto es de prestar servicio, y a la vez dar visibilidad a la situación de jóvenes que viven una realidad muy diferente a la de los alumnos de Gainberri. Es por ello que los alumnos que actualmente se están formando para convertirse en futuros técnicos deportivos han trabajado con jóvenes de entre 20 y 30 años procedentes de Argelia, Marruecos y Senegal, entre otros países. En una primera intervención, realizaron una actividad al aire libre que consistía en una ruta por el monte organizada por los alumnos de Gainberri, donde mantuvieron una dinamización de juegos y actividades para que jóvenes de procedencias diferentes pudieran interactuar y relacionarse. A pesar de la barrera que pueda suponer el idioma, fueron capaces de comunicarse y empezaron a establecer un vínculo.

En un segundo encuentro, Jatorkin invitó a los alumnos de Gainberri a dinamizar una jornada de deporte rural vasco con juegos tradicionales como la sokatira, txingas, carreras de sacos, toka y recogida de mazorcas, y finalmente, en una tercera sesión realizaron actividades deportivas con ejercicios de iniciación al voleibol y partidos cortos. Una vez finalizada la sesión, todos los integrantes del proyecto se acercaron a Gainberri para disfrutar de un almuerzo organizado por los propios alumnos, que recibieron el agradecimiento y el calor de los participantes. Además de estas tres intervenciones, han llevado a cabo una campaña de recogida de ropa en el centro en la que recogieron gran cantidad de mantas, sacos de dormir, toallas, etc. para enviar a la sede de Jatorkin, de cara al invierno.

La valoración del proyecto ha sido «muy positiva» por ambas partes. «En la asignatura de inclusión trabajamos con diferentes colectivos en riesgo de exclusión (personas de la tercera edad, enfermos mentales, inmigrantes…) lo que más allá del propio trabajo curricular, permite crear consciencia de los problemas sociales que nos rodean y vemos que con pequeñas acciones somos capaces de hacer cambios», señala Jon Bonilla, profesor de Gainberri, mientras que Ibone Aristegui, trabajadora de Jatorkin, recalca que «los usuarios han disfrutado mucho de las actividades y ha sido de agradecer la actitud activa de los alumnos a la hora de interactuar con ellos. Las actividades han cumplido el objetivo de favorecer la integración y promover relaciones positivas a través del deporte».