Esta pasada madrugada se registró la última de las llegadas de migrantes a Canarias, en concreto a la isla de Gran Canaria, con el desembarco de casi medio centenar de personas en el muelle de Arguineguín.

Como es tendencia en los últimos meses, estos migrantes se acercaron a la costa a través de la Ruta Canaria a bordo de una neumática, la embarcación más peligrosa para cruzar el Atlántico.

Salvamento Marítimo ha sido la entidad encargada del rescate de 45 migrantes, que fueron localizados a bordo de una esta precaria embarcación al sureste de Gran Canaria. Los ocupantes fueron trasladados al muelle de Arguineguín donde fueron valorados por el Servicio de Urgencias Canario (SUC) y Cruz Roja.

A pesar de la dureza del viaje, todos presentaron buen estado general, y únicamente fue necesario un traslado a centro hospitalario por diferentes patologías.

Esta llegada de migrantes en buen estado apenas ha estado separada de la última, mucho más trágica. Una embarcación de recreo rescató el pasado martes a un náufrago localizado en alta mar agarrado a un bidón. En el Muelle de Pasito Blanco, en Gran Canaria, donde fue asistido este varón de origen magrebí por el personal sanitario aseguró que viajaba en una neumática que volcó con una decena de personas a bordo. A pesar de las labores de búsqueda, en la zona solo fueron localizados los restos de una neumática semihundida, sin más supervivientes ni cuerpos localizados por el momento.

De acuerdo a los datos del Ministerio de Interior, hasta el pasado 15 de noviembre habían llegado a las costas canarias 14.875 personas en 333 embarcaciones, lo que supone un descenso del 17,6% en relación al mismo periodo del pasado año. Aún así Canarias supone más de la mitad de los migrantes que han llegado en total a territorio español en estos 10 meses y medio de 2022, con un acumulado de 26.839 personas por vía marítima.