Cyril Hanouna, el 'showman' de la televisión francesa que rema a favor de la ultraderecha

El Periodico, Enric Bonet, 19-11-2022

El presentador Cyril Hanouna contra el diputado de izquierdas Louis Boyard. En la última semana, corrieron ríos de tinta en Francia sobre la bronca que uno de los showman de la televisión gala dio a este joven representante, 22 años, de la coalición progresista NUPES —formada por la Francia Insumisa, el Partido Socialista, los verdes y los comunistas—. “Bufón”, “cierra tu boca”, “eres un enfermo”, “un mierda” o “eres un inútil, ¡cállate!”, le dijo el 10 de noviembre el periodista de uno de los programas más vistos las tardes por los telespectadores franceses al diputado más joven en la historia de la Quinta República, que terminó abandonando el plató ante los aplausos del público.

¿A qué se debió esta humillación? Boyard cometió el pecado de hablar en el programa Touche pas mon poste! (TPMP, ¡No me toques mi puesto!), presentado por Hanouna en la cadena C8, sobre las investigaciones judiciales en África de los negocios del empresario Vincent Bolloré, uno de los 10 hombres más ricos de Francia y criticado por haber construido un imperio mediático que promueve ideas ultraconservadoras. Los insultos contra Boyard, que reprochó al presentador que no le dejara criticar al propietario de la cadena, representan una polémica más de las protagonizadas por Hanouna, considerado como un “engranaje esencial” del “sistema Bolloré”.

Hanouna insulte le député LFI Louis Boyard dans TPMP: “Je m’en bats les couilles que tu sois élu. Tu crois que j’ai peur de toi ou quoi?! Espèce d’abruti!T’es un abruti. Tocard. Bouffon”. Peut – être que Mélenchon et sa formation vont arrêter de se rendre à son émission? pic.twitter.com/wxsz3QaiKj

Tras el incidente, el diputado, miembro de la Francia Insumisa (afines a Podemos), presentó una denuncia contra Hanouna y pidió la creación de una comisión parlamentaria que investigue la influencia de Bolloré sobre los medios. El presentador respondió con otra denuncia y organizando un programa sobre este incidente, en que sus tertulianos se dedicaron a insultar y tachar de “desagradecido” a Boyard, quien había participado el año pasado con regularidad en TPMP

Esa emisión del 14 de noviembre retuvo a más de dos millones de telespectadores delante del televisor, siendo la más vista este año. Superó por poco otro programa en octubre dedicado al escabroso asesinato de la adolescente Lola, en que se defendió el restablecimiento de la pena de muerte. El organismo encargado de la regulación de los medios anunció este viernes que había ordenado un aviso formal al presentador por esa emisión en que se hizo una oda al populismo punitivo.

Las ideas de ultraderecha sobre la inmigración y la seguridad y su fantasma de una Francia al borde de una guerra civil por las religiones —y eso que el 70% de los franceses aseguran no estar demasiados interesados por las religiones— cuentan con un potente altavoz con TPMP. Todo ello gracias a un showman, cuyo perfil parece a las antípodas de un vocero del conservadurismo, nacionalismo e islamofobia. 

Hijo de una familia de judíos sefarditas oriundos de Túnez, Hanouna, 48 años, creció en la localidad residencial de Les Lilas en el departamento de Seine – Saint – Denis, situado en la periferia norte de París y uno de los más pobres de Francia. Sin haber hecho estudios de periodismo, pero fascinado por la televisión, hizo sus primeros pinitos en el mundillo como guionista y humorista. Presentó programas de entretenimiento y humor desde principios de los años 2000. TPMP fue creado en 2010 para la cadena pública France 4 como una emisión de debate sobre la cultura televisiva. Era el equivalente de un Alfons Arús a la francesa.

Después de que TPMP —cuyo nombre se inspiraba de una famosa campaña de SOS Racismo, en que militaba Hanouna— pasara a la cadena privada C8, se convirtió en un programa sobre sucesos. Hanouna se presenta como “un simple mediador” y defiende su programa como una “emisión popular pero no populista”, aunque él cobra un salario anual de medio millón de euros. Asegura que su única preocupación es contar cada vez con más espectadores y entretenerlos. Pero a través de la búsqueda del espectáculo, del zasca permanente y de hablar sin tapujos, aunque esto comporte mala educación, las ideas de ultraderecha fueron ganando peso. Todo ello gracias al filtro del humor y el entretenimiento.

La historiadora e investigadora universitaria Claire Sécail ha presentado esta semana el estudio ‘Las elecciones presidenciales según Cyril Hanouna’. Durante la precampaña de los comicios de abril, según este artículo académico, TPMP dedicó un 44,7% de su tiempo de antena a hablar del polemista ultranacionalista e islamófobo Éric Zemmour, cuya candidatura se vio catapultada por el grupo Bolloré, también formado por Canal +, la cadena de información CNews —conocida como la Fox francesa— y la emisora de radio Europe 1.

La ultraderechista Marine Le Pen también contó con el beneplácito de un programa en que se la presentó como una dirigente “benevolente” y como la “madre de los franceses”. El eurodiputado Jordan Bardella, que sucedió recientemente a Le Pen como presidente de la Reagrupación Nacional, participó en cinco ocasiones en los últimos meses en la emisión. En ella se elogió su sonrisa de yerno ideal. Todo un contraste respecto al trato recibido por el diputado de izquierdas.

Hanouna representa un “engranaje esencial del grupo de Vincent Bolloré”. “Comparo a Bolloré con el sistema de (Rupert) Murdoch con The Sun y The Times. Murdoch jugaba en dos tableros distintos con dos tipos de registros, que movilizaba en su guerra cultural para hacer avanzar sus ideas ultraconservadoras en la sociedad thatcheriana de la década de 1980”, explica Sécail en una entrevista para el digital Les Jours. Aunque la extrema derecha pierde en las urnas en Francia, sus peones avanzan de manera preocupante en el tablero de las ideas. Todo ello gracias a aliados inesperados como Hanouna.

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